Las tardes veraniegas en Aracena para muchos jóvenes han sido calurosas, no obstante, han sido ilusionantes para muchos gracias a la práctica del fútbol. Un verano más se ha organizado la escuela mini en el campo municipal de San Jerónimo, una iniciativa fomentada desde el Patronato de deportes de la localidad serrana. El objetivo principal ha sido ofrecer una alternativa diferente durante la temporada estival.

El club local de la Unión Deportiva Aracena junto al propio Patronato velan durante la temporada liguera por el bien de la Escuela de Fútbol Base, encargada de disputar encuentros contra otras escuelas similares de pueblos cercanos. Allí se fomenta con ímpetu tanto la formación como la educación deportiva antes que la obtención de un mero resultado. Esta escuela de mini fútbol tiene además como objetivo actuar como trampolín hacia la mayor, la Escuela de Fútbol Base. Para ello, sus integrantes, de edades inferiores a los pertenecientes a la anterior, se preparan con ilusión y energía con la meta de ascender y en un futuro formar parte de las categorías de la Unión Deportiva de Aracena.

Durante los lunes y miércoles, en el campo de fútbol municipal San Jerónimo, alrededor de cuarenta niños y niñas se han divertido en las tardes de verano practicando el llamado deporte rey. La organización siempre ha tratado de contribuir en favor del juego limpio, la deportividad y la participación igualitaria, aunque aún continúa teniendo más aficionados masculinos.

Cada niño va vestido con sus mejores galas futbolísticas y resulta bonito ver cómo cada uno lleva la camiseta de su equipo. Este verano ha destacado la de la selección española tras el éxito cosechado en la pasada edición de la Eurocopa.

La dirección de la escuela de mini fútbol ha partido, un año más, del monitor José Alonso Romero Cano, entrenador del conjunto senior de la Unión Deportiva Aracena, equipo cadete y Escuela de Fútbol Base. En cada entrenamiento han aprendido los conceptos básicos y normas esenciales del fútbol. El fuera de juego ha supuesto más trabajo a la hora de explicar y poner en práctica por los pequeños participantes. Cano ha contado en todo momento con la ayuda de otro monitor, el joven Alejandro Alcaide, quien ha tratado de facilitar el trabajo a los chicos.

A la hora de poner en práctica lo aprendido, no han faltado padres, abuelos o conocidos dispuestos a apreciar la evolución.

Tras esta escuela dará comienzo la próxima temporada, donde la Escuela de Fútbol Base será la protagonista, esperando que muchos de estos chicos formen parte de la misma y continúen en el apasionante mundo del fútbol.