moguer: Fernando, Peroli, Quico (Cata), Pepelu (Mauri), Pablo, Javi Carrasco, Antonio, Regidor (Piquillo), Gallinato, Loren y Luis. VILLABLANCA: David Lepe, Francisco Javier, Jesús, Paredes, Cruz, Caro, Miguel Ángel (Carrillo), Mario, Leonardo, Guirado y Jesús Sánchez 'Canito'. Árbitro: Gómez Contreras; regular; mostró tarjeta amarilla a los locales Quico, Cata y al entrenador José Antonio Rúa; y a los visitantes Francisco Javier, Caro, Guirado, Pereles (en el banquillo), y al entrenador Colombo, y expulsó con roja directa a Paredes (m. 65). Gol: 0-1/Minuto 65. Canito. Incidencias: Partido adelantado a la jornada, disputado anoche en Moguer con frío, y con lluvia antes y durante el partido.

El Moguer sumó su segunda derrota en casa y con ello le dio vida al Villablanca, que sigue en puestos de descenso pero ve más cerca la salvación. Los locales estuvieron espesos en ataque, mientras los visitantes sí encontraron la portería en un encuentro con pocas ocasiones de gol, en el que las defensas se impusieron a los ataques.

El partido resultó igualado, sin un dominador claro. Los primeros minutos fueron de tanteo; hasta el 25' no llegó la primera ocasión de peligro, la más clara del choque, cuando un remate de Gallinato pasa por debajo de las piernas del portero y éste desvía a corner con el talón. Poco más dio de sí una primera mitad nivelada, pero sin acciones brillantes.

En la continuación el partido siguió con los mismos derroteros, hasta que en el m. 65 Canito realiza una gran acción individual, desborda a la defensa, llega al área y cruza el balón para poner el 0-1. Fue la acción clave, puesto que el Villablanca, a partir de ahí, jugó cómodo y ordenado en defensa, tapando bien las acometidas del rival.

El Moguer, tras el gol encajado y aprovechando la superioridad numérica por la expulsión de Paredes, se fue en busca del empate, pero con más corazón que cabeza. Apenas hubo ocasiones, aunque en el minuto 85 llegó la polémica, con una jugada que acabó en gol de Antonio, pero el árbitro invalidó la acción puesto que antes había pitado falta sobre un jugador moguereño, y no concedió la ley de la ventaja.

Al final, los puntos fueron para el equipo que más los necesitaba, un Villablanca que tuvo la efectividad que le faltó al Moguer.