La imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno, de la hermandad que lleva su nombre y conocida como la Madrugá, presidió el vía crucis de la Semana Santa de Aracena. Se inició con puntualidad, a las nueve de la noche y con mucho frío en la localidad serrana, aunque se esperaba incluso más. Pese a todo, es probable que haya sido el vía crucis más multitudinario que se recuerda en la localidad. Además, pudo realizarse en la calle, ya que de las últimas nueve ediciones solo tres lo pudieron hacer y el resto dentro de su iglesia.

Un vía crucis organizado por el Consejo de Hermandades y Cofradías de Aracena y en esta ocasión con la Hermandad de Nuestro Padre Jesús. La salida y entrada tuvo lugar desde la sede canónica de dicha hermandad, la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción. El recorrido fue diferente, bonito y emotivo. Desde la Plaza Alta bajó por Jesús María para seguir por la calle Colón, subir por el Cabezo y recorrer buena parte de la Avenida de Andalucía. Además de la calle José Nogales, subir por Vicario con parada en la casa Hermandad del Cautivo, bajar por Cantarranas y Mesones hacia la Plaza Marqués de Aracena, siguiendo por Julián Romero, Santa Catalina, Rosario Cañizares y entrada de nuevo en la parroquia. El recorrido duró dos horas y se hicieron las catorce estaciones del vía crucis. En este caso, con todo lujo de detalles, la hermandad colocó en cada parada una cruz y una vela. Diferentes cofrades fueron leyendo de cada estación con la presencia e intervención, en cada caso, del cura párroco Longinos Abengózar Muñoz. Además, hubo varios jóvenes de la hermandad de acólitos acompañando a la cruz de guía de la hermandad que iniciaba el cortejo. La imagen de Nuestro Padre Jesús fue, como en todos los vía crucis, en parihuela y portado por los hermanos y cofrades que así quisieron, e incluso algunos de sus costaleros. Y, por supuesto, como ya es habitual y nada extraño por suerte, muchas mujeres durante el recorrido portaron al Señor de Aracena junto a los hombres. En este caso siempre bajo la directriz del equipo de capataces de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús.

Como es habitual el vía crucis lo presiden cada año, siempre por orden cronológico de las diferentes procesiones, las imágenes de Cristo de las seis hermandades de penitencia en Aracena.

El pasado año fue presidido por el Cristo de la Sangre, que no puedo salir y se realizó en el interior del Castillo, al ser su sede canónica. De los últimos nueve años solo en tres ocasiones se ha hecho el recorrido previsto por la calle y no se realizó en el interior del templo; 2012 (Santo Entierro), 2014 (Cautivo) y actual 2016. Curiosamente los años pares. La última vez que le tocó el vía crucis a Nuestro Padre Jesús también se hizo dentro del templo por la lluvia y en la anterior ocasión sí en la calle, al igual que en esta ocasión.

El próximo año la imagen protagonista del vía crucis será el Cristo de la Plaza.