Si Almonaster la Real es uno de los pueblos más singulares de la Sierra de Aracena, y de obligada visita durante todo el año, más aún lo es en su periplo festivo y cultural, rico en tradiciones ancestrales como las Cruces de Mayo, la Romería de Santa Eulalia y, ahora, las concurridas y exitosas Jornadas de Cultura Islámica, que finalizan mañana tras un puente que ha permitido que la iniciativa se desarrolle durante cuatro días frente a los tres de las últimas ediciones.

Las jornadas arrancaron en su primera parte con menos público, a falta de contar con los numerosos visitantes tanto de hoy como de mañana. La climatología ha sido adversa, sobre todo en la tarde inaugural del jueves, y ayer muchos miraron también hacia el cielo, aunque el tiempo fue notablemente mejor que el día anterior.

Pese a todo, en estas jornadas que se celebran en pleno otoño serrano, el tiempo adverso suele estar muy presente cada año sin reducir el éxito y alto número de visitas. De hecho, el tiempo mejora para este fin de semana, cuando se espera a más personas.

Almonaster enseña con orgullo su pasado, subrayando y disfrutando de la convivencia pacífica de religiones, pensamientos, culturas, tradiciones, historias, personas de variadas procedencias, diversión y entretenimiento. Se conjugan fiesta y buen rato entre familia y amigos. Una confluencia perfecta de culturas, personas diferentes y procedencias dispares.

Por segundo año consecutivo, las jornadas disfrutan de la convivencia con un país extranjero donde la comunidad islámica es muy importante. En esta ocasión el protagonista es Malasia, tras el estreno del pasado año con Indonesia, visible en la jornada inaugural.

Justo a la entrada del pueblo por la travesía, y próximo a los aparcamientos, está el inicio del zoco, con numerosos puestos de productos artesanos y artículos de todo tipo, habituales cada año. Casi un centenar de propuestas artesanas en Almonaster, que recuerda a la Almunastyr de la época islámica que ahora se conmemora.

La entrada al recinto desde hace unos años es más visible y bella. Todo, como siempre, muy cuidado y al detalle, con un alto nivel en estos años, y un recorrido atractivo y muy cuidado.

Además, hay un exorno apropiado, vestimentas para la ocasión de los puestos, telas y colgaduras de colores llamativos en algunos puntos como junto a la Iglesia de San Martín, el Ayuntamiento o la Plaza de Toros.

Almonaster recupera de verdad su pasado andalusí. La actividad es incesante desde media mañana y hasta bien entrada la noche, y suelen avisar por megafonía de las grandes citas. Y, como en los últimos años, hay wifi disponible por el zoco, pudiendo también participar en el concurso de fotografías en Twitter o Instagram subiendo fotos con las etiquetas #Islámicas2018 y #Almonaster.

La mayoría de visitantes hacen el recorrido completo y llegan al final, es decir, suben al punto más alto de Almonaster la Real, presidida por su coqueta Mezquita (hay visitas guiadas por la asociación local Amigos de la Mezquita), y siendo el elemento arquitectónico islámico más representativo de la zona y de buena parte de Andalucía. Pese a la multitud de personas y al refuerzo con agentes de la Policía Local de otros pueblos y varios efectivos de la Guardia Civil, la tranquilidad y ausencia de incidentes son la nota predominante en las jornadas año tras año.

Las populares Jornadas de Cultura Islámica llegan al fin de semana en su momento más álgido y esperan a una multitud de personas para disfrutar de los bailes en plena calle, la animación constante, las actividades, los espectáculos para todos los públicos, la diversión y también la formación, a través de unas jornadas de la Universidad de Sevilla, con diferentes ponencias (XIV Simposio Internacional) y exposiciones.