España, a la cabeza de la preocupación por la seguridad de los datos personales

La preocupación por la privacidad digital alcanza máximos históricos en España, donde un 93% de los ciudadanos manifiesta inquietud por la seguridad de sus datos personales, situando al país a la cabeza de Europa en esta materia.

Según revela una investigación paneuropea realizada por FleishmanHillard TRUE Global Intelligence y Focaldata, los españoles no solo expresan mayor preocupación que la media europea (88%), sino que un 72% admite sentirse abrumado por la gestión de su privacidad digital, frente al 49% del promedio continental.

El estudio Privacy is Power, impulsado por Samsung, pone de manifiesto una importante paradoja: mientras el 60% de los jóvenes españoles piensa diariamente en la privacidad de su smartphone (superando el 49% europeo), aproximadamente un tercio (32%) descuida completamente la seguridad de otros dispositivos conectados del hogar.

Seungwon Shin, EVP y Head of Security Team en Samsung Electronics, ha destacado que la investigación "destaca una tendencia creciente: aunque los consumidores son proactivos a la hora de gestionar la privacidad en sus smartphones, a menudo pasan por alto el ecosistema más amplio de dispositivos conectados". En palabras del directivo, también "refleja una cierta reticencia a adoptar por completo experiencias impulsadas por la inteligencia artificial, motivada en gran parte por la incertidumbre en torno al uso de los datos".

España lidera el estrés por privacidad en Europa

Los datos del estudio confirman que España encabeza la clasificación europea en cuanto a estrés relacionado con la gestión de la privacidad digital.

Un contundente 88% de los encuestados españoles afirma experimentar tensión por este tema, muy por encima del 75% de la media europea. Esta preocupación se agudiza ante la percepción generalizada de complejidad: un 20% de los españoles considera que la privacidad digital es un asunto demasiado intrincado, similar al sentimiento europeo.

La investigación también revela una importante brecha de conocimiento: apenas el 14% de los españoles se siente realmente informado sobre cómo se gestionan sus datos personales, prácticamente en línea con el 13% europeo.

Esta carencia educativa explica por qué el 75% de los españoles reclama una mejor formación sobre datos y privacidad, superando significativamente el 67% del promedio continental.

El impacto de la desconfianza en la adopción tecnológica

La preocupación por la privacidad está condicionando claramente las decisiones de consumo tecnológico. En España, el 86% de los usuarios considera la privacidad un factor determinante al adquirir nuevos dispositivos, ligeramente por encima del 80% europeo. Sin embargo, solo el 57% de los españoles conoce realmente qué información recopilan sus dispositivos, frente al 48% del conjunto europeo.

Este desconocimiento se traduce en conductas pasivas: un 30% de los españoles acepta configuraciones predeterminadas sin comprenderlas realmente (similar al 31% europeo), mientras que un alarmante 68% siente que jamás podrá controlar completamente su privacidad digital, superando el 64% europeo que comparte esta resignación.

Las consecuencias para la innovación son evidentes: el 20% de los españoles ha renunciado a compartir datos entre dispositivos inteligentes por temor a vulnerabilidades de seguridad, ligeramente por encima del 18% europeo.

No obstante, existe una oportunidad clara para la industria: el 69% de los españoles (frente al 62% europeo) estaría más dispuesto a adoptar tecnologías con inteligencia artificial si comprendiera mejor sus beneficios y sintiera que sus datos están adecuadamente protegidos.

La Generación Z y los Millennials frente al reto de la privacidad

El estudio Privacy is Power arroja luz sobre cómo las generaciones más jóvenes -precisamente las que han crecido en un entorno digital- están gestionando su privacidad en la era de la hiperconexión. Resulta paradójico que, pese a su aparente familiaridad con la tecnología, sean precisamente estos grupos los que expresan mayor preocupación.

Los jóvenes españoles de entre 18 y 43 años muestran una elevada concienciación sobre los riesgos digitales, con un 60% pensando diariamente en su privacidad. Sin embargo, su enfoque sigue siendo principalmente limitado a los smartphones, descuidando otros dispositivos del ecosistema conectado que representan potenciales vulnerabilidades.

¿Qué medidas podemos tomar para proteger nuestra privacidad digital?

Ante el panorama descrito por el estudio, los expertos recomiendan diversas acciones para mejorar la protección de datos personales. Revisar periódicamente los permisos concedidos a aplicaciones, utilizar contraseñas robustas y diferentes para cada servicio, y mantener actualizados todos los dispositivos conectados -no solo los smartphones- son algunas de las prácticas básicas recomendadas.

También resulta fundamental informarse sobre las políticas de privacidad de los fabricantes antes de adquirir nuevos dispositivos inteligentes, y configurar adecuadamente las opciones de privacidad en lugar de aceptar los ajustes predeterminados.

La formación en seguridad digital emerge como una necesidad prioritaria para los ciudadanos, especialmente considerando que un 75% de los españoles la demanda explícitamente.

¿Por qué se considera España el país más preocupado por la privacidad digital?

Diversos factores pueden explicar por qué España lidera la preocupación europea por la privacidad digital. El alto índice de penetración de smartphones en el país, uno de los más elevados de Europa, junto con la rápida adopción de dispositivos conectados para el hogar, expone a los españoles a mayores riesgos potenciales.

Adicionalmente, la cobertura mediática sobre brechas de seguridad y el creciente debate público sobre los riesgos asociados a la inteligencia artificial pueden estar sensibilizando especialmente a la población española.

La percepción de falta de control sobre los datos personales (68%) evidencia un sentimiento generalizado de vulnerabilidad que las empresas tecnológicas deberán abordar si desean recuperar la confianza de los consumidores.

Como señala David Alonso, vicepresidente y director de Negocio de Movilidad de Samsung España, “en España, vemos una clara demanda de transparencia y control. Por eso, en Samsung no solo protegemos los datos, sino que ofrecemos el control para decidir cómo se recopilan y utilizan en todo momento. Nuestro ecosistema, impulsado por Knox, garantiza una experiencia conectada segura y adaptada a las necesidades de cada usuario”.