Temprano, antes de las nueve de la mañana, cientos de personas ya esperaban al buque Juan Sebastián de Elcano en el muelle de Cádiz. Después de que en Marín (Pontevedra) desembarcaran los 74 guardiamarinas que se han formado en este crucero de instrucción, la dotación, con una gran mayoría de gaditanos, estaban hoy por fin en casa. Y la alegría se desbordaba.

Las pancartas para Mónica, Raúl, Diego José, Carmen, e incluso un original "¡Bienvenida Bichota, que tiemblen las calles y los bares",  se veían entre las cientos de personas ansiosas por abrazar a los suyos. Pero esta vez, los carteles también venían desde el otro lado, desde el barco. "Ya está aquí mamá". Con globos, la cabo primero Laura era la primera en desembarcar y todas las cámaras grababan su felicidades, deseando dar un beso a sus dos hijos.

"Ha sido una experiencia brutal, como un crucero", contaba contenta esta isleña rodeada de familiares. "Creo que han venido por los menos 25", apuntaba entre risas. "Ha ido muy bien, mucho compañerismo, las visitas", contaba, asegurando que no le importaría repetir. "¿Pero mamá se queda en casa, no?, le hablaba a su hijo emocionada tras encontrar además el amor.

Abrazo a la llegada del buque al muelle.

Hubo que esperar un rato para ese reencuentro esperado. Aunque el barco llegó puntual al puerto, acompañado de distintas embarcaciones, tocaba una breve ceremonia. El Almirante Ignacio Villanueva Serrano, Jefe del Estado Mayor de la Flota, subía al Elcano para dar la bienvenida de la Flota "a vuestra casa". También lo hacía para los invitados que ha podido hacer la travesía desde Galicia hasta Cádiz, en los sitios que han dejado los guardiamarinas, y entre los que se pudo ver al subdelegado del Gobierno en Cádiz, José Pacheco.

"Habéis navegado por zonas apasionantes y demandantes -como el Río de la Plata, los canales fueguinos y patagónicos- y realizado hitos históricos, como el cruce a vela por primera vez del Cabo de Hornos", recordó. "Os hemos seguido en casa milla y habéis cumplido la misión de forma sobresaliente", les decía.

El nuevo alcalde de Cádiz, Bruno García, también tuvo la palabra en esta ceremonia militar, donde tuvo la oportunidad de agradecer a la dotación que "llevan a Cádiz y a España por bandera", "mostrando la máxima admiración por parte de la ciudad de Cádiz".

Fue entonces, y tras desembarcar la Galeona, que ha acompañado los miembros de la Armada en este viaje, camino de Santo Domingo; cuando por fin fue el turno de los abrazos, los besos y las lágrimas, pero de alegría. 

Visitas tras su llegada

El buque escuela, en el muelle de Cádiz poco antes de atracar este viernes.

Su comandante, Manuel García Ruiz, también estaba emocionado. Ha estado al frente en los dos últimos cruceros, y será relevado el próximo 27 de julio, una vez finalizado el periodo de mando, por el CN Luis Carreras-Presas do Campo. "Me llevo unos enormes recuerdos y la mayor satisfacción de haber realizado las misiones que nos encomendaron de formar a nuestros guardiamarinas y representar de la mejor forma posible a la Armada y España en el exterior", comentaba a los medios, recordando además la "gran fortuna" de cruzar por primera vez a vela el Cabo de Hornos, que quedará para la historia.

"Las dos llegadas son muy emotivas (por la de Marín y Cádiz). "Allí los sentimientos se mezclan con los guardiamarinas y sus familias, que desembarcan en la Escuela Naval, pero en Cádiz llegamos a nuestra ciudad en un barco con mayoría de dotación gaditana y los sentimientos afloran a mayor nivel en un barco unido a este lugar", añadía el capitán de navío.

En este viaje el Juan Sebastián de Elcano ha visitado los puertos de Santa Cruz de Tenerife, Rio de Janeiro (Brasil), Buenos Aires (Argentina), Punta Arenas (Chile), El Callao (Perú), Cartagena de Indias (Colombia), Puerto Limón (Costa Rica), Pensacola (Estados Unidos) y Nueva York (Estados Unidos).

El buque escuela estará en la ciudad hasta esta tarde, cuando comience su traslado a la Carraca para comenzar a la preparar "inmediatamente", el siguiente crucero de instrucción. Entre las once de la mañana y las cinco hay jornadas de puertas abiertas y se puede visitar.