La estación de tren de Bahía Sur lleva más de 10 días afectada por una "avería total" del centro de transformación que se encarga de proporcionar el suministro de energía eléctrica a todas las instalaciones. 

El problema no afecta a la circulación de los trenes pero sí se deja notar en otros servicios: las escaleras mecánicas no funcionan y la cafetería ha tenido que cerrar sus puertas. 

Renfe ha confirmado la existencia de este problema que se remonta al pasado 4 de noviembre, si bien asegura que se trata de "una situación provisional", que además "no afecta al tránsito de viajeros de la estación ni a la prestación del servicio de trenes". 

Dado que el centro de transformación ha quedado inoperativo, la estación se abastece desde entonces con un grupo electrógeno, con el que cuentan todas las instalaciones de este tipo, que se activa cuando falla la fuente principal.  

Aunque las escaleras mecánicas han dejado de funcionar, el acceso a la estación de Bahía Sur para personas con movilidad reducida está garantizado, explica Renfe, dado que los ascensores -los dos existentes- sí funcionan con total normalidad. 

Tampoco se ve afectado el sistema de tornos, la iluminación de los andenes ni los distintos sistemas de seguridad, aclara. 

Estación de Bahía Sur.

En cuanto al servicio de cafetería y el funcionamiento de las escaleras mecánicas estarán sin servicio hasta que se proceda a la instalación de un nuevo centro de transformación "y se recupera la capacidad energética que precisa la instalación". 

Precisamente, con anterioridad a la avería, desde el mes de octubre, Renfe ya tenía en curso la sustitución del centro de transformación que se ha visto afectado. Ahora, asegura que la empresa encargada del mantenimiento llevará el cambio "a la máxima celeridad posible". 

La situación, sin embargo, ha desatado las quejas de algunos usuarios de la estación, que han trasladado su malestar por el cierre de la cafetería y por el problema de las escaleras mecánicas. 

Fue en febrero de este mismo año cuando por fin se terminaron las obras con las que Renfe solventó el grave problema de accesibilidad que la estación de Bahía Sur ha arrastrado en los últimos años al estrenar nuevas escaleras mecánicas y ascensores, una intervención que supuso más de 1,5 millones de euros de inversión y unos ocho meses de obras. Así que el fallo del transformador ha vuelto a poner el foco ahora en las carencias de una estación de tren que ya se creían superadas. 

Cafetería de la estación de Bahía Sur, cerrada por el fallo en el centro de transformación.