La Mancomunidad de Desarrollo Condado de Huelva, que aglutina a 15 municipios, se creó en 1990 con el objetivo de fomentar el desarrollo socioeconómico e impulsar la mejora de la calidad de vida de sus habitantes. Desde sus inicios, esta entidad se ha preocupado por reforzar y poner en valor una serie de importantes valores identitarios que otorgan una fuerte personalidad a la comarca y la hacen muy atractiva para las personas que la visitan.

Desde el punto de vista del patrimonio natural, buena parte de su territorio lo ocupa un paraíso para las personas amantes del turismo de naturaleza y de la ornitología: el Parque Nacional de Doñana, declarado Patrimonio de la Humanidad y, además, por sus tierras transcurre el río Tinto, con sus peculiaridades paisajísticas que lo hacen único en el mundo.

Detalle de Doñana.

Otro atractivo de la comarca es su rico y variado patrimonio histórico y cultural, fruto del paso de numerosas civilizaciones que han ido dejando su huella. Así, existen restos de origen tartésico, como Tejada la Vieja en Escacena del Campo. Asimismo, en Niebla, se pueden apreciar manifestaciones de la civilización romana y del esplendor de la etapa musulmana, de las que quedan constancia en la Iglesia Nuestra Señora de la Granada y en el Castillo de los Guzmanes. De esta época son también el Castillo almohade de Moguer, la muralla almohade de Tejada la Nueva (Paterna del Campo) o la Iglesia Castillo de San Bartolomé (Villalba del Alcor).

En la imagen, Niebla.

Muy interesantes son muchas de las iglesias de la comarca, algunas de tipo fortaleza, como la de Villalba del Alcor y la de Hinojos; y otras relevantes por su arquitectura, como la de Palos de la Frontera (de estilo gótico-mudéjar) y la de Manzanilla (mudéjar y barroco); o por su singularidad, como la ermita del Rocío en Almonte. Además, destacan varios conventos como los de Santa Clara y San Francisco de Moguer, San Juan Bautista de Villalba del Alcor y el antiguo Convento de Nuestra Señora de la Luz de Lucena del Puerto.

Es trascendental, también, la vinculación de sus pueblos con el Descubrimiento de América, con el que se relacionan espacios tan potentes como los Lugares o el testimonio documental de que fue el vino del Condado el primero que viajó al Nuevo Mundo.

Patrimonio literario y etnográfico

Desde el punto de vista literario es relevante la figura del poeta moguereño Juan Ramón Jiménez, Premio Nobel de Literatura, cuyo legado patrimonial se puede visitar en su Casa Museo en Moguer, municipio totalmente impregnado de la vida y la obra del escritor. Así, es posible recorrer las calles contemplando el museo al aire libre "Platero EScultura", los azulejos con pasajes de su obra, su tumba en el cementerio, su casa natal, etc.

Detalle de la casa museo de Juan Ramón Jiménez, en Moguer.

En cuanto al patrimonio etnográfico, existen elementos como el vino del Condado y su cultura asociada; las romerías, entre las que sobresale la del Rocío, en Almonte, a la que acuden todos los pueblos de la comarca; las singulares Cruces de Mayo, presentes en muchos de los municipios, aunque destacan las de Bonares, declaradas "Fiesta de Interés Turístico Nacional de Andalucía"; o determinadas celebraciones, algunas tan arraigadas como el Día del Corpus Christi, declarado Bien de Interés Cultural en la localidad de Hinojos.

Detalle del Corpus de Hinojos.

Asimismo, encontramos gran número de elementos del patrimonio etnográfico material de gran relevancia, como numerosas bodegas; las torres almenaras de la costa; las haciendas, entre las que destaca la de Alcalá de la Alameda, en Chucena; los molinos de agua del cauce del río Tinto como el de Gadea (Villarrasa); y los cascos históricos de algunos municipios, como los de Moguer, Rociana del Condado o La Palma del Condado, reconocidos como BIC.

Todas estas tradiciones y elementos relacionados con la vida diaria de las personas, en el pasado y en el presente, le confieren al Condado de Huelva una atractiva idiosincrasia que se pone al servicio de la actividad turística, de modo complementario a su importante infraestructura de sol y playa y a su genuina oferta gastronómica.

Quienes llegan al Condado pueden disfrutar de la experiencia de compartir con sus gentes este inmenso acervo cultural y gozar de una tierra privilegiada que no deja indiferente a los que se adentran en ella.

Los vinos del Condado son exquisitos.