Beas, un lugar para disfrutar sin prisas

En el corazón de Huelva, entre paisajes que se funden entre la Campiña y el Andévalo, se encuentra Beas, un rincón lleno de esencia rural y naturaleza viva. Al sur del municipio, se extienden parajes como el Ruedo, el Balcón de la Loma, la ermita de Clarines o los Caminosdel AOVE, testigos del alma agrícola y olivarera de la zona, que se alzan como un patrimonio único de sus vecinos.

Beas, con sus lugares y hospitalidad, invita a recorrer sus entornos con calma: desde la Ruta de las Dehesas hasta el sendero de los Molinos del Agua, pasando por la Majada Nueva o el Camino de las Cruces, cada paso revela una postal distinta, entre encinas, arroyos y tradición.

La experiencia se completa con una visita a sus almazaras, donde el aceite de oliva virgen extra se convierte en protagonista. En Candón, la naturaleza sigue brillando con el corredor ecológico de las Riberas del Arroyo, mientras que, al norte, Fuente de la Corcha y los Baldíos de Beas ofrecen un paisaje fluvial de gran valor.

Destacar la identidad de las Fiestas Patronales de San Bartolomé, del 23 al 30 de agosto, con la suelta tradicional de vaquillas de ganaderos locales, de gran atractivo por la bravura del ganado, y el encanto de su plaza de empalizada, con encierros tradicionales a caballo el primer y el último día, acompañados de novilladas y de un cartel de artistas de primer orden, además de la procesión del patrón del día 24 de agosto, el “santo bailongo”, donde todo el pueblo baila con él al ritmo de charanga, es algo que no te puedes perder.

En invierno tiene lugar el Belén Viviente de Beas, el más antiguo deAndalucía, que llena el pueblo de espíritu navideño. Al inicio de la primavera, su importante Feria del Aceite de Oliva Virgen Extra, y la Semana Santa que recorre sus calles con arte y fervor, dejando postales para el recuerdo del que lo visita.

Cuna de alfarería, tierra de aceite y de fiestas con alma, Beas es un lugar para descubrir, vivir y sentir.