Ayer, miércoles 31 de mayo, varios efectivos de la Guardia Civil acompañados de perros especializados en la búsqueda de restos biológicos y del Equipo de Criminalística así como de una dotación de bomberos comenzaron a registrar una finca que habría sido propiedad de Antonio Caba.

Éste, que fue detenido en marzo y permanece en prisión desde entonces, es el principal sospechoso de haber acabado con la vida de Juan Miguel Isla, otro vecino de Manzanares que desapareció en verano de 2022, un año y medio después de que lo hiciera Jesús María González. Ambos se habían citado con Caba para la venta de una finca y unos coches de alta gama, respectivamente, en la que el detenido actuaba como intermediario de la transacción.

El cuerpo de Juan Miguel Isla lo encontraron el pasado marzo, oculto en un pozo que se encontraba en una finca de Antonio Caba. Esto motivó la detención tanto de él como de su socio, Gaspar, un hombre de 76 años, vecino de la localidad, que habría actuado como colaborador en el crimen.

Ahora este mismo hombre ha querido mostrarse colaborador con la justicia y hablar sobre la desaparición de Jesús María, hace casi cuatro años. De esta forma Gaspar ha declarado ante la jueza que instruye el caso que el cuerpo del desaparecido podría encontrarse en otra finca que perteneció a Antonio Caba y que actualmente está en uso (se trabaja en ella).

El motivo por el que el que fue socio de Caba está hablando ahora podría deberse a un deseo por obtener beneficios en su condena gracias a su confesión. A cambio podría recibir el trato de encubridor de Antonio Caba y no de cómplice, con la correspondiente reducción penal.

Los investigadores creen que en caso de que Caba esté implicado también en esta desaparición el móvil podría estar en una gran suma de dinero que el intermediario le debía a González, y que se cifraba en unos 25.000 euros.

Primeras conclusiones tras la búsqueda

Tras varias horas de registro en dicha finca los investigadores han encontrado indicios de que parte del cadáver podría estar oculto en el pozo que se inspeccionó ayer. Puesto que éste tiene unas dimensiones pequeñas los efectivos no contaban con la maquinaria adecuada para proceder a su registro, que se llevará a cabo hoy, 1 de junio, en torno a las 17:00 horas tras haber solucionado este problema.

Ahora los agentes de la Guardia Civil se encuentran registrando otro pozo cercano en el que también podría haber restos del desaparecido.

Ambas búsquedas se están llevando a cabo en presencia de los dos detenidos por el crimen de Isla y sospechosos de la desaparición de González. Ninguno de los dos puede hablar entre sí y tienen que estar en todo momento acompañados de sus respetivos abogados.

Junto a ellos y las personas que trabajan en la investigación también están los familiares de Jesús María González, que aguardan pacientemente a conocer los resultados de la búsqueda. Miguel, hermano de la víctima, ha explicado a Ya es Mediodia que “están en sus manos ahora mismo” refiriéndose a los agentes de la Guardia Civil.

Estos llevan casi cuatro años trabajando a destajo para esclarecer que pudo pasarle a Jesús María. La Benemérita, por su parte, está convencida de que los datos que tienen son buenos y que están cerca de resolver el caso.