Huelva es cofrade todos los días de año. La Hermandad de la Cena inundó de amor las calles de la ciudad en una jornada histórica para la cofradía en la que su titular recibió la medalla de Huelva, un reconocimiento civil que el Ayuntamiento ha realizado con motivo de su 75 aniversario. Esta semana en las calles se han convertido en un hervidero de fe en el que desde el martes las marchas cofrades no han dejado de sonar en cada rincón. 

El paso de misterio de la Cena llegó a San Francisco el miércoles 7 de junio para presidir el Corpus Christi, que se celebró la jornada siguiente y en el que el Cristo del Amor tomó una especial relevancia presidiendo el altar principal en la plaza de la Constitución. La Esperanza le abrió sus puertas durante la semana y tras unos días atendiendo a los actos por su aniversario volvió a El Polvorín, un barrio que le esperaba con los brazos abiertos.

La ciudad se volcó en el acto en el que numerosos devotos se acercaron al Ayuntamiento para no perderse detalle. La plaza de la Constitución se engalanó para rendir homenaje a una Hermandad que se dejó la piel y en la que estuvieron presentes el alcalde de Huelva en funciones, Gabriel Cruz; el hermano mayor, José Ivars, autoridades civiles y militares y representantes de cofradías de penitencia y de gloria. 

La Orquesta colombina onubense comenzó a tocar para amenizar una emotiva celebración en el que el Gabriel Cruz, realizaba su último acto público como alcalde de Huelva y en la que invitó "a seguir comprometidos con la Semana Santa de Huelva, porque la ciudad no se entiende sin sus cofradías y que sigamos peleando por la fe y estemos orgullosos de esta tradición". Además, puso en valor la trayectoria de la Hermandad de la Cena en la ciudad "se trata de una cofradía que ha tenido 75 años de historia y ha estado muy presente y participativa en la vida diaria de la ciudad". El alcalde en funciones recordó la entrega y retrató el día a día de la ciudad en la que se ha acordado de los jóvenes, los mayores, la banda y todos los hermanos que ponen su grano de arena para que todo sea posible. 

La Hermandad de la Cena es una referente para el resto de cofradías de Huelva, siendo la primera en abrir las puertas de su Casa de Hermandad y convirtiéndose en la primera en tener el título de sacramental. Una cofradía de tres cuartos de siglo, que tal y como han retratado desde la Junta de Gobierno es un ejemplo de lugar de encuentro, convivencia y devoción por sus titulares. El hermano mayor, también dedicó unas palabras a todos los hermanos en las que no quiso dejarse un agradecimiento hacia el Consistorio de la ciudad. 

Cuando llegó el momento esperado todos se pusieron en pie para ver como el Cristo del Amor lucía la medalla de oro en su pecho entregada por el alcalde. Un momento que quedó grabado en la retina de todos los presentes y que sigue engrandeciendo el mundo cofrade de Huelva. 

Tras el acto, la Hermandad de la Cena puso rumbo a su barrio en el que se recreará bailando las marchas que su banda interpreta y llegando a El Polvorín en un noche en la que la Virgen del Rosario aguarda impaciente. Todos los devotos lo siguieron hacia su templo tras unas jornadas intensas en las que la ciudad mostró su fe en cada acto. Ahora toca aguardar a la salida extraordinaria de la Virgen del Rosario que está programada para el 7 de octubre. Además, lo cofrade reinará en el mes de junio con la Coronación de la Virgen de la Amargura que ya se está preparando en La Placeta para el próximo 17 de junio.