Antonio Arcos: "Venimos al Recre con la ilusión de llevarlo de nuevo donde se merece"
El extremo afronta su primera campaña a nivel senior tras su paso por los filiales de Sevilla, Cartagena y Tenerife
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La última semana de mercado coincide también con el final de las 13 incorporaciones que ha llevado a cabo el Recreativo de Huelva este verano. En orden de posiciones, este martes le ha tocado el turno a los atacantes, con Antonio Arcos, Mario da Costa y Roni, tres nombres que han causado sensación en pretemporada dado el potencial ofensivo que ha mostrado el conjunto de Pedro Morilla durante los amistosos.
El director deportivo de la entidad, Roberto Ríos, aprovechó para agradecer públicamente "el esfuerzo que han hecho" porque "es una tónica general" la ilusión que tenían ellos por venir al Recre. "Estamos muy contentos y son tres jugadores que nos van a dar velocidad, versatilidad, desborde y gol", añadió.
Antonio Arcos fue el primero en hablar. El atacante sevillano manifestó que "he tenido bastante interés de equipos de Primera RFEF incluso, pero como han dicho varios compañeros, no venimos a jugar a Segunda RFEF, venimos al Recre, que es un equipo histórico, con la ilusión de llevarlo de nuevo donde se merece. Nos atrapa mucho el proyecto, cuando nos llamó Roberto nos gustó la idea y por eso estamos aquí".
Será su primera aventura como senior tras pasar por la cantera del Sevilla y recalar posteriormente en el filial del Cartagena y Tenerife, donde "he tocado entrenamientos pero no he tenido ficha con el primer equipo", por lo que se siente "contento y orgulloso de estar en el Recre".
Precisamente, Arcos no guarda un buen recuerdo de sus últimos meses en el Sevilla. El jugador tuvo una serie de desavenencias con su último entrenador, lo que le hizo incluso perder la ilusión por el fútbol. "He estado allí 14 años, es verdad que lo pasé mal en los últimos cuatro o cinco meses por ciertos motivos, pero estoy feliz, llevo un par de años jugándolo todo, he vuelto a sentirme futbolista y jugar aquí te viene muy bien para sentirlo".
El hispalense se define como un extremo "vertical, un jugador descarado. Me gusta el fútbol de calle, soy un jugador de uno contra uno, de tirar paredes, de no tener miedo. Es verdad que alguna vez tengo que evitar las pérdidas", esgrimió acerca de su juego.
Una forma de jugar que "tanto a mí como a mis compañeros nos viene a la perfección porque somos jugadores de banda y lo que busca el míster es atraer por dentro para buscar por fuera la superioridad. Tenemos un equipo muy bueno, de calidad y asociativo que nos viene de perlas".
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