El balón parado persigue a los albiazules como un mantra esta temporada. Con Alberto Monteagudo costó muchos puntos y de momento con Claudio Barragán no termina de enderezar el rumbo el equipo albiazul en esa faceta. Es cierto que mostró síntomas de mejora en fases importantes de los tres encuentros con el valenciano, pero en La Línea un saque de esquina le costó la derrota.

El centrocampista Gustavo Quezada asume que “hay muchas cosas que trabajar”. Sobre el balón parado confiesa que “nos está costando mucho”. Ante la Balona reconoce que “había un buen rival con jugadores con un golpeo de mucho nivel”, pero “también tenemos nosotros la culpa”.

El pivote albiazul sostiene que el próximo mes debe ser determinante para despejar fantasmas y respirar en la clasificación. De los próximos partidos dependerá “si vamos a sufrir o no”. Para no pensar más allá opta por “no echar cuentas, pensar solo en ganar partidos y salir de ahí lo antes posible”. Ante la visita del Marbella reconoce que “será un partido muy complicado. Del duelo contra la Balona “trabajamos los errores”, aunque insiste en que la jugada del gol fue “una acción muy rápidas en la que fallamos”.

La solución de Claudio Barragán es intensificar el trabajo. Por ello ayer la plantilla volvió a tener doble sesión de entrenamiento. Los albiazules trabajaron por la mañana en la Ciudad Deportiva y por la tarde se volvieron a machacar en las instalaciones recreativistas. La situación no admite relajación. Claudio quiere incrementar la intensidad en sus hombres y para ello aprovecha cada jornada de trabajo. El equipo volverá a ejercitarse hoy a las 17:00 de nuevo en la Ciudad Deportiva con ese objetivo claro.