El pasar de la competición está siendo positivo para un Recreativo que se ha instalado en lo más alto de la tabla clasificatoria, pero todo tiene un coste. El Decano ha regresado en la mañana de hoy a los entrenamientos tras dos días de descanso para la plantilla y lo ha hecho con algunas preocupaciones. La más importante se focaliza en el delantero Chendo Alarcón. El ex del Linares ha tenido que abandonar la sesión con una molestia muscular en el gemelo que ha encendido la luz de alarma en la enfermería albiazul. El ariete será sometido a pruebas en las próximas horas que determinarán si el futbolista podrá participar o no en el choque del próximo domingo ante el Antoniano (Municipal de Lebrija, 12:00).

Tampoco se ha ejercitado hoy otro de los hombres fuertes de Alberto Gallego, Cristian Terán. El sevillano sufre una gastroenteritis que le ha impedido estar en la primera sesión de la semana, pero su concurso ante el Antoniano no debería correr peligro. Sin entrenar también se han quedado el meta Gonzalo Piña, que sigue arrastrando las dolencias que le dejaron fuera de la lista ante el Rota, y el canterano Rubén Serrano, que sigue quemando etapas en la recuperación del esguince de tobillo que le está manteniendo fuera de la dinámica del grupo desde el encuentro ante el Utrera de la primera jornada.

Pero también ha habido luces en el entrenamiento celebrado en Pérez Cubillas. El central Anaba y el atacante Marc Fraile han dejado atrás las molestias que habían tenido en la pasada semana y se han incorporado con normalidad al resto de un grupo que también ha visto como el meta del filial Manu Díaz, que ya estuvo en la convocatoria del pasado domingo ante el Rota, y el centrocampista Juanma Galán han sido llamados a filas por Alberto Gallego en la mañana de hoy.