El siniestro de una furgoneta provoca una fuga de gas tóxico

Efectivos del Consorcio de Bomberos extinguieron ayer un incendio de una furgoneta, de la empresa Desur Agrícola, cargada con unos 40 kilogramos de plaguicidas a base fosfuro de aluminio. El hecho obligó a la desviación del tráfico en el kilómetro 53 de la A-49, a la altura de la localidad de Bollullos Par del Condado, sentido Sevilla, quedando controlado el fuego a las siete de la mañana. Durante el siniestro se liberó un peligroso gas tóxico.

Según informó a Europa Press la Guardia Civil, los hechos tuvieron lugar sobre las 23:25 de la noche anterior en el kilómetro 53 de la citada carretera, momento en el que se tuvo que desviar el tráfico. A pesar de la aparatosidad del siniestro no se produjeron daños personales, ya que al conductor y el acompañante abandonaron el vehículo.

La Delegación del Gobierno indicó en un comunicado que el tráfico se tuvo que desviar por la localidad de Villarrasa y a la zona acudieron técnicos del Servicio de Emergencias 112 Andalucía, agentes de la Guardia Civil de Tráfico, bomberos del Consorcio Provincial Contraincendios y Policía Local de Bollullos, que permanecieron allí hasta que se retiró el vehículo y se reabrió la calzada al tráfico.

La furgoneta siniestrada transportaba principalmente fosfuro de aluminio, un producto que con su extinción libera fosfina, una sustancia tóxica, circunstancia por la que estas tareas se realizaron lentamente para evitar emanaciones de gases a la atmósfera. No se produjeron daños personales por esta causa.

Por el momento se desconocen las causas que han provocado el incendio, que ya están siendo investigadas por la Guardia Civil. Una llamada de un particular a las 23:34 del lunes al Teléfono de Emergencias 112 alertó del incidente.

El Consorcio de Bomberos indicó en una nota que las llamas fueron muy virulentas debido a que este material reacciona muy violentamente con el agua, provocando incluso pequeñas explosiones, por lo que es necesario otros materiales para poder rebajar la temperatura y las llamas y una precaución extrema para evitar que se propague. El incendio resultó bastante aparatoso porque esta sustancia al contacto con el agua provoca fosfina, un gas tóxico que puede perjudicar al sistema respiratorio, pero, por suerte, el viento fue estable durante toda la noche, por lo que los bomberos pudieron controlar tanto las llamas como el humo y evitar que se propagase a casas, edificios y naves colindantes a la autovía.