El valor en origen de la fresa para el consumo en fresco continúa descendiendo a consecuencia, unido a la bajada de la demanda de los mercados, nacional e internacional, y del consumo por la crisis sanitaria. La bajada del volumen comercializado de fresa en la última semana de marzo ha sido del 20,24%, respecto a la semana anterior.

En la semana trece de lo que va de año, el precio medio en campo se estima en 0,83 euros el kilo, lo que representa un 12,3% inferior respecto al de la semana anterior, según los datos del observatorio de precios de la Junta de Andalucía que elabora con los aportados por diferentes comercializadoras de la provincia de Huelva. Este nivel de precio apenas alcanza para cubrir el actual coste de producción de la fresa.

La última semana de marzo de la campaña de la fresa se ha caracterizado de nuevo por el descenso del consumo a raíz de que los principales mercados de destino han restringido su demanda de manera considerable ante el establecimiento de medidas más restrictivas para luchar contra el coronavirus.

Por el momento, para evitar la retirada de fruta, la industrial está absorbiendo de forma prematura importantes cantidades de fresa a la que los agricultores no han podido dar salida en el mercado de consumo en fresco, pero a precios reducidos que solo alcanzan los 0,30 euros el kilo.

Las condiciones meteorológicas que se registran en los últimos días en la provincia onubense, lluviosos y con poco sol han contribuido a frenar la producción y evitar así un mayor excedente de fruta que los mercados no puede absorber por la situación actual.

Aumenta la demanda de la frambuesa pero desciende también su precio en origen

El precio de la fresa cae en picado desde hace dos meses. Así, desde la primera semana de febrero hasta la última de marzo el valor en origen de la fruta se ha reducido un 38,6%, al pasar de los 2,15 euros el kilo a los 83 céntimos actuales.

La frambuesa, al contrario que en fresa, en la semana de marzo el volumen comercializado creció casi un 25% respecto a la semana anterior, pero el precio en origen descendió hasta los 4,9 euros el kilos, un valor muy bajo para estas fechas. Desde febrero, el precio ha caído un 67,7%, al pasar de los 7,23 euros el kilo a los 4,90 euros de la última semana de marzo.

En cuanto al arándano, se ha producido una reducción del volumen comercializado en la última semana de un 6%. El precio percibido por el agricultor experimentó también un descenso y se sitúa en 4,72 euros el kilo, un 5,5% por debajo del precio de la semana anterior.

Ante estas circunstancias, el sector de los frutos rojos solicita ayudas específicas para una campaña seriamente dañada. La bajada del consumo y de los precios mantienen en jaque a los productores por encima de la mano de obra, en la actualidad.