La Policía confirma que la mujer encontrada muerta en Cartaya fue asesinada "a martillazos" y busca al presunto autor

La Policía confirma que la mujer hallada sin vida en su domicilio de Cartaya este jueves fue asesinada "a martillazos" y que el presunto autor de la muerte se encuentra en busca y captura. Según fuentes policiales, de momento no hay detenidos y la investigación sigue en marcha.

El cadáver fue encontrado en el interior de la vivienda ubicada en la calle Madroño, en la Barriada del Almendral. Se trata de un domicilio donde en los últimos años han aparecido dos hombres fallecidos "en extrañas circunstancias". Uno de ellos era hijo de la víctima encontrada este jueves.

Desde el Ayuntamiento indicaban que eran los vecinos quienes daban el aviso a la Policía al escuchar los gritos de la persona que descubrió el cadáver. Según testigos, fue un albañil que tenía previsto comenzar obras en el domicilio quien localizaba el cuerpo a las 8:00 de la mañana. Las citadas fuentes han indicado que el albañil había sido pareja de la mujer y tenía antecedentes de violencia hacia ella, por lo que la mujer había estado incluida en el sistema VioGén de seguimiento a las víctimas de violencia de género hasta el año pasado. No obstante, el albañil es de momento testigo y se está buscando a la actual pareja de la victima, con la que convivía y que no está registrada en el sistema VioGén.

Hasta la zona se desplazaron agentes de la Policía Local e, inmediatamente, también de la Guardia Civil, que se ha hecho cargo de la investigación.

En estos momentos, efectivos del Servicio de Criminalística de la Guardia Civil se encuentran en la vivienda recabando indicios para esclarecer lo sucedido. La investigación está en su fase inicial para determinar las causas del suceso y por el momento no se descarta ninguna hipótesis.

Según ha podido saber este diario, en la zona en estos momentos se vive un ambiente de "gran confusión" y conmoción entre los vecinos. Pasadas las 10:00 de la mañana llegaba el coche de la funeraria para retirar el cuerpo de la fallecida.