La plaza Ramón y Cajal será accesible a todos tipo de usuarios
El Ayuntamiento asegura que los trabajadores contratados son todos locales
El alcalde accidental de Valverde del Camino, Francisco Rodríguez, justificó ayer las obras de la plaza Ramón y Cajal de Valverde "por motivos de estética, ya que la anterior estaba ya muy deteriorada y, sobre todo, por motivos de solidaridad, porque el nuevo espacio permitirá que la plaza sea utilizada por todos los colectivos sociales".
Con un presupuesto de casi 400.000 euros, desde el lunes la gran mayoría de los trabajadores que la renuevan son valverdeños.
La nueva plaza conservará las figuras más relevantes de la anterior como los bancos de azulejería, los de fundición, las cuatro palmeras, las farolas y el buzón de correos. El primer elemento de transformación de esta plaza será la pavimentación. Perderá altura, se ampliará su extensión y se soterrarán los contenedores de residuos. Pero el primer cambio que sufrirá la plaza será por cuestiones solidarias.
En este sentido, Rodríguez explicó que "lo nuevo de esta plaza será que cualquier persona podrá utilizarla porque se eliminarán todas las alturas para que todo el mundo tenga acceso a la plaza". Este cambio solidario ha servido para criticar a quienes no están de acuerdo con la remodelación, como el PP.
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