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La pintura mural serrana de Huelva y su divulgación digital

Divulgación digital de las pinturas murales serranas.

Divulgación digital de las pinturas murales serranas. / H.I. (Huelva)

El patrimonio está permanentemente presente en el Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche. En sus diversas vertientes, las muestras culturales, históricas, monumentales y etnográficas salpican la geografía de la comarca serrana onubense. Uno de estos elementos es el de las pinturas murales, descubiertas y conservadas en numerosos edificios en veintisiete de los veintinueve municipios que la componen oficialmente.

Esos murales han carecido hasta la fecha de un exhaustivo estudio, en su conjunto, a pesar de haber sido tratados por diferentes especialistas a lo largo del último siglo. Uno de los primeros estudiosos del tema fue el restaurador Jesús Mendoza, que a su labor en muchos de los inmuebles serranos añadió en 1999 un trabajo sobre algunos testimonios murales de la zona, con motivo de las Jornadas del Patrimonio de la Sierra que se celebraron en Cortelazor la Real.

Pero se trata de un estadio investigador que no ha tenido quien le escribiese. Para paliar este déficit hay que recurrir al trabajo de Antonio Manuel Cuaresma Maestre, quien se ha propuesto estudiar y divulgar un tesoro patrimonial desconocido en gran parte. Este arocheno, licenciado en Historia del Arte por la Universidad de Sevilla (2001-2006), y Técnico en Turismo por la Diputación de Granada (2007), realizó en 2020 el Máster en Historia y Humanidades Digitales en la Universidad Pablo de Olavide, de Sevilla, universidad en la que se encuentra hoy día realizando el programa de Doctorado. Desde el año 2009, es responsable del departamento cultural de Centro Mundolengua, centro internacional en el que imparte como profesor por convenio con la Universidad pablo de Olavide la asignatura ‘Historia de Sevilla en su escenario’, dentro del Centro Universitario Internacional ubicado en Sevilla, España.

Lleva cinco años insistiendo en diversas fórmulas para conocer y difundir este patrimonio, aplicando métodos científicos para su catalogación y conservación digital, defendiendo como objetivo principal la puesta en valor de los murales. Su reciente artículo ‘El patrimonio como elemento de cohesión territorial. La pintura mural en la Sierra de Huelva’, publicado en el libro ‘Sierra Morena en la encrucijada. Despoblación, crisis rural y expectativas de desarrollo sostenible’, pone de actualidad una trayectoria que se va consolidando como pionera en la zona y en otras áreas geográficas.

Su metodología toma como marco teórico de la investigación las Humanidades Digitales para documentar y catalogar en una base de datos, elaborada con el software Omeka, todos los testimonios pictóricos. Se obtiene así como resultado un repositorio de todos los murales de la comarca, mostrándose por primera vez como un conjunto, desde los primeros testimonios del siglo XV a los realizados en este siglo XXI. A ello suma la posibilidad de realizar una visita virtual por algunos edificios con pinturas, a las que se añaden etiquetas descriptivas multimedia centradas en una base de datos cada día más amplia y enriquecida.

Tipos y etapas en la pintura mural serrana

Según Cuaresma, podemos encontrar este elemento artístico tanto en edificios religiosos (iglesias o ermitas) como edificios civiles (casinos sociales o casas de las poblaciones). Cronológicamente, los primeros testimonios son de principios y mediados del siglo XV, como lo demuestran los ejemplos de las pinturas halladas en la ermita de las Virtudes en la Nava o algunos motivos de la ermita de San pedro de la Zarza, hoy bajo la advocación de San Mamés en Aroche. Existe un importante momento pictórico en el siglo XVIII, pudiendo encontrar también numerosas realizaciones en el siglo XX. Pero el historiador lleva su estudio a nuestros días, sumando el arte antiguo y las nuevas formas de pintar sobre las paredes, porque el grafiti está llegando a La Sierra, con una amplia cantidad de murales del realizados en este primer cuarto del siglo XXI.

A través de la catalogación, ha propuesto agrupar todos los testimonios en cuatro grandes periodos cronológicos, atendiendo estas a una serie de características que se pueden apreciar en los murales. El primero de ellos es el correspondiente a las ‘Creaciones Locales’, en las cuales se incluyen todos los murales realizados durante el siglo XV y el siglo XVI, de temática religiosa y que “pertenecen a una fase inicial en la transición de lo que sería más propio de formas del estilo románico al gótico, que de fórmulas renacentistas pertenecientes a su periodo cronológico de realización”. Destaca en este grupo el que muchos de los municipios serranos donde se conservan estos testimonios son lugares alejados de los grandes focos artísticos que marcan los estilos predominantes. Son diez las localidades donde hay murales de este periodo; Almonaster la Real, Aracena, Aroche, Cala, Cañaveral de León, Cortelazor, Hinojales, La Nava, Puerto Moral y Santa Olalla del Cala.

El siguiente periodo ha sido denominado ‘Modernidad’, ya que engloba todas las facturas realizadas entre el siglo XVII y el siglo XIX, donde además de la temática religiosa destaca la arquitectura fingida, los motivos geométricos y las decoraciones de rocallas barrocas para decorar tanto edificios religiosos como civiles. Los quince municipios donde podemos ver estas pinturas son Almonaster la Real, Aracena, Aroche, Castaño del Robledo, Cortelazor, Cortegana, Cumbres de Enmedio, Cumbres de San Bartolomé, Encinasola, Galaroza, Higuera de la Sierra, Jabugo, Puerto Moral, Santa Olalla del Cala y Zufre.

Todos los murales realizados en el siglo XX son encuadrados en un periodo llamado ‘Eclecticismo’. A pesar de ser este el estilo predominante, destaca en bastantes obras el estilo neobarroco. Es un periodo donde ya se puede hablar de autores, destacando entre ellos Rafael Blas Rodríguez, Francisco Muñiz, Juan Montes, Rafael Rodríguez y Aurelio del Portillo, que ejecutan sus obras principalmente en edificios religiosos. Se pueden admirar obras de este grupo en Alájar, Almonaster la Real, Castaño del Robledo, Cortegana, Encinasola, Galaroza, Jabugo, Linares de la Sierra, Santa Ana la Real y Valdelarco.

El último periodo artístico en La Sierra, según Cuaresma, sería el conocido como ‘Arte Rural Actual’, ya que se refiere a las realizaciones de este siglo XXI, un momento creativo en el cual sí podemos hablar en su totalidad de autores. Estos son Víctor García ‘Repo’, ‘Cristian Blanxer’, Carolina Carmona ‘K-Lina’, Sara ‘Heylava’, Isaac García ‘Azero’, Valentín Romero, Antonio Claudio Reinero y Ricardo Castiglia. Estos muralistas utilizan diferentes técnicas y soportes para sus composiciones, en los que destaca la flora, fauna, folclore, paisaje o trabajo tradicional de la comarca serrana. Se trata de un arte que está teniendo un gran desarrollo en la actualidad en muchos municipios y es posible encontrarlos en Almonaster la Real, Aracena, Aroche, Arroyomolinos de León, Castaño del Robledo, Corteconcepción, Cortegana, Galaroza, La Nava, Los Marines, Santa Ana la Real y Valdelarco.

En cuanto a la técnica utilizada en la realización, ha ido acorde con la época en la que han sido realizadas, por lo que encontramos pintura al fresco, técnica mixta en la que se realiza el fresco para el dibujo preparatorio y la terminación se hace al temple, temple o las realizaciones de estos últimos años realizadas muchas de ella utilizando la técnica del grafiti.

Las representaciones más arcaicas responden a un carácter medieval, a pesar de ser realizadas en el siglo XV. Su temática religiosa centra principalmente toda la producción hasta el siglo XXI, momento este en el que se están realizando numerosos murales centrados en aspectos etnográficos y sobre todo en flora y fauna del territorio, dejando constancia de la importancia de este universo ambiental, al encontrarse en la mayoría de la comarca dentro del Parque Natural Sierra de Aracena y Picos de Aroche y ser Reserva de la Biosfera Dehesa de Sierra Morena.

El arte mural serrano digitalizado

Su trabajo cuenta con el apoyo de la Asociación Rutas Sierra, con la que lleva años realizando un exhaustivo estudio aplicando el método científico y consiguiendo unos resultados que están siendo presentados en diferentes congresos, seminarios y simposios académicos, tanto nacionales como internacionales, con numerosas publicaciones al respecto que se pueden encontrar tecleando en cualquier buscador web ‘Pintura Mural en la Sierra de Huelva’.

Todo ello ha conformado un ambicioso proyecto en torno a la ‘Pintura Mural en la Sierra de Huelva’ que ha denominado ‘PMSierra’, conformando una base de datos documental que recoge todos los murales, más de ciento cincuenta, con unos campos descriptivos que desgranan uno a uno cada ejemplo pictórico. El resultado más visible por el momento es el poder realizar visitas virtuales por dos enclaves de especial importancia en la comarca, como son el Santuario de la Reina de los Ángeles Coronada, en Alájar, y la ermita de San pedro de la Zarza, en Aroche. En ambos edificios se ha realizado un levantamiento aerofotogramétrico y una proyección ortográfica volumétrica que permite realizar una visita en alta resolución centrada en las pinturas murales que se conservan en ambos edificios, de las que se han realizado unas etiquetas descriptivas multimedia centrada en su base de datos sobre los murales.

Se trata de un proyecto participativo, ya que, junto a esta base de datos artística, se está elaborando otra, junto a los agentes locales correspondientes de cada pueblo, sobre los lugares de hostelería, restauración y pequeño negocio local, a los que poder acudir al realizar alguna de las rutas que se propondrán en el futuro para visitar los ejemplos de pintura mural, centradas en aspectos cronológicos y temáticos.

La difusión, puesta en valor y conservación digital de los murales, son algunos de los objetivos de esta investigación, además de darle la importancia que tiene a este apartado histórico artístico en la provincia de Huelva y por extensión para la Historia del Arte de Andalucía, además de dar visualización al territorio tomando como elemento para ello la pintura mural de la comarca serrana onubense.

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