Un teatro Puerta del Andévalo con el patio de butacas lleno, recibió al pregonero de la Romería del Rocío en Valverde del Camino, el párroco de la localidad, Servando Pedrero. Junto a todos estos rocieros valverdeños se encontraban el alcalde de Valverde del Camino, Manolo Cayuela; el presidente de la Hermandad del Rocío de Valverde del Camino, Paco Losada y la Hermana Mayor de este año, Rosario Bermejo.

En un ambiente muy rociero, el párroco pronunció emocionado un pregón muy personal, un encargo que recibió de la Hermana Mayor, “con sorpresa y con la incertidumbre de enfrentarse a lo desconocido”. Así, Pedrero transmitió con sus palabras, emociones y vivencias, “y de conectar con un Rocío con el que todo el mundo se puede sentir identificado”.

Dedicado a Rafael, al antiguo sacristán de Valverde, que lamentablemente falleció hace unos meses, “que con nervios, alegría y responsabilidad se enfrentaba a cada Rocío y quien me enseñó que el cordón de la medalla es como una álbum de fotos, que con sólo mirarlo, evoca todos tus recuerdos”.

Servando destacó el papel de la Virgen como madre, “que nunca desoye los rezos de sus hijos” y ha querido recordar a todos los presentes que “nadie, sea creyente o no creyente, queda fuera del amor de María”. El párroco valverdeño finalizó con un mandato y deseo para todos los presentes, “ser rocieros y hermanos durante todos los días del año”. El pregón, amenizado por el coro Amigos del Camino, al cante y la bailaora Alegría Navarro.