La naturaleza salvaje de Ayamonte

Ayamonte cuenta desde el 15 de julio de 2006, día de su inauguración, con el único núcleo zoológico de la provincia de Huelva. El Parque Municipal Prudencia Navarro se encuentra situado en pleno centro de la ciudad, algo muy característico y que llama mucho la atención a todos los visitantes ya que normalmente este tipo de zoos se suelen ubicar a las afueras de las ciudades.

En él podemos encontrar gran variedad de especies salvajes, como leones, tigres, osos, cebras, monos, gansos, ocas, patos y tortugas, entre otras muchas especies animales y vegetales, siendo estas últimas muy cuidadas por su gran valor natural.

Todos los animales están bajo control a través de unos microchips que sus cuidadores les han colocado para tenerlos controlados ante cualquier imprevisto. La empresa, Wildvest, mantiene un exhaustivo control de toda la población animal del zoo, que como norma general ha nacido en cautividad. Todos ellos proceden de donaciones o intercambios con otros parque zoológicos o particulares quienes buscan para estas especies un lugar lo más favorable posible para su desarrollo y supervivencia.

Este núcleo zoológico, Paco Conde, cuenta con diversas instalaciones y recintos adecuados para acoger a estas especies, son recintos exteriores desde los que los visitantes pueden observarlos a través de grandes cristaleras o mallas metálicas que ofrecen la posibilidad de acercarse lo máximo posible a todos ellos. Además cuenta con un pequeño lago donde encontramos una gran variedad de especies, como los patos chinos o los cisnes, entre otras.

Las especies que más llama la atención son los felinos, ya sean leones o tigres, y los osos, por su espectacular tamaño y comportamiento. Destacando el especial interés por los monos, debido a la simpatía que despiertan entre los más pequeños.

Además de estas instalaciones exteriores el parque cuenta con unos cubiles interiores donde los animales descansan y reciben los cuidados de los veterinarios y los cuidadores del parque. Desde allí son vacunados, alimentados y observados por biólogos para estudiar su comportamiento entre ellos y con las demás especies. Todas las semanas se desarrollan juegos en los recintos para que los animales desarrollen su instinto, como el intercambio de pelos de una especie al recinto de otra, el esconder la comida en tubos a los monos, congelada a los osos y entre las rocas a los leones para que de esta forma desarrollen su instinto de supervivencia.

El parque cuenta con un amplio y variado suministro de alimentos, desde carne de pollo a ternera hasta fruta y verdura, supervisados por veterinarios y cuidadores, quienes se encargan de que cumplan las medidas de calidad exigidas por la normativa vigente. El proceso de alimentación comienza con la selección dependiendo de cada especie y de su posterior preparación.

El zoológico permanece abierto de martes a domingos de 10:00 a 22:00 horas viéndose reducido su horario en invierno. La entrada es gratuita para todos los públicos. Durante todo el año el parque recibe multitud de visitas los fines de semana, destacando en todo momento las visitas organizadas de los colegios de la zona e incluso portugueses y las excursiones de mayores.

Durante los meses de julio, agosto y septiembre la afluencia de público aumenta considerablemente por los veraneantes y extranjeros que eligen esta zona para pasar sus vacaciones.