La provincia de Huelva cuenta con 28 municipios que han sido declarados prioritarios para acogerse al Programa de Reindustrialización y Fortalecimiento de la Competitividad Industrial 2020, también conocido como Programa Reindus, dotado con 340,9 millones de euros.

El objetivo del plan, aprobado por el Consejo de Ministros el pasado 28 de julio es favorecer la consolidación de la industria tras la salida de la crisis derivada de la Covid-19. El Boletín Oficial del Estado ha publicado las bases reguladoras de la convocatoria correspondiente a 2020 del Programa.

La edición del Programa Reindus 2020 está dirigido a empresas afectadas por perjuicios económicos surgidos a raíz del brote de Covid-19, legalmente constituidas en España, que desarrollen una actividad industrial productiva, con independencia de su tamaño, y que no formen parte del sector público.

En Andalucía 264 municipios han sido clasificados como zonas prioritarias para la financiación de los proyectos. Las localidades onubenses declaradas prioritarias son Aljaraque, Hinojos, Palos de la Frontera, Almonte, Huelva, Punta Umbría, Aracena, Isla-Cristina, Rociana del Condado, Ayamonte, Jabugo, San Bartolomé de La Torre, Bollullos Par del Condado, Lepe, San Juan del Puerto, Calañas, Minas de Riotinto, Trigueros, Cartaya, Moguer, Valverde del Camino, Cortegana, Nerva, Villanueva de los Castillejos, Cumbres Mayores, Niebla, Gibraleón y La Palma del Condado.

La subdelegada del Gobierno de España en Huelva, Manuela Parralo, ha subrayado la importancia de estas ayudas para “favorecer la consolidación de la industria tras la salida de la crisis derivada del Covid-19, relanzar la producción y conseguir el reposicionamiento de las empresas industriales en el mercado”.

El plazo de presentación de solicitudes expira el 20 de agosto y el importe global del préstamo a conceder por beneficiario no podrá superar los 800.000 euros. El Plan Reindus cubre actuaciones como la mejora y modificación de las líneas de producción y la adquisición de equipos, la financiarán las inversiones orientadas a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, la reducción de la vulnerabilidad a los impactos del cambio climático, la prevención de la contaminación o la introducción de la economía circular en el proceso productivo mediante.