Los mariscadores de Isla Canela rechazan la creación de una nueva reserva

La Asociación Amaya de Isla Canela, a la que están asociados los mariscadores que trabajan en la zona de la desembocadura del Guadiana, han manifestado su desacuerdo con la Orden del 1 de Abril de la Consejería de Agricultura y Pesca para la creación de una reserva marisquera en el litoral de la provincia de Huelva.

Según la asociación, no están satisfechos en absoluto con esta Orden, porque "sólo se cumple una de nuestras demandas, que es la de cobrar los días de contaminación con carácter retroactivo".

Los mariscadores consideran que no se ha dado respuesta a las peticiones y demandas que "repetidas veces" le han hecho llegar tanto a la Delegación Provincial de Pesca como Ayuntamiento de Ayamonte y demandan en que si existe contaminación del marisco, que pueda ser tratado en la depuradora de Ayamonte, que cumple todos los requisitos para ese fin, así como que todas las personas que se dedican de manera profesional a la actividad del marisqueo puedan tener acceso a regularizar su situación.

También, solicitan que puedan tener libre acceso a todas las zonas de marisqueo del litoral onubense, "tal como otros compañeros lo tienen", a la par que exigen que haya "vigilancia y control absoluto" sobre bañistas y turistas que con su actividad ilegal acaban con el marisco en las playas.

La situación de los mariscadores es "desesperada" porque aseguran que no reciben ningún tipo de ayuda, ni en la veda ni cuando el marisco está contaminado, por eso recuerdan que han pedido "en muchas ocasiones" que el Ayuntamiento de Ayamonte cumpla con su promesa de llevar a cabo "un Plan de Desarrollo Pesquero en el que los mariscadores podamos participar asistiendo a cursos de formación". Pero después de varios meses "no han hecho nada", lamentan.

La Orden de 1 de abril de 2011 de la Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía ha causado distintas reacciones entre los mariscadores de las distintas modalidades. La Junta concluyó el pasado mes de abril en declarar como reserva marisquera en el litoral de la provincia de Huelva cuatro zonas que se suman a las ya existentes. El sector pesquero asume las nuevas zonas de reserva con discrepancias. Los mariscadores de coquina ven satisfechas sus demandas mientras que los chirleros reclaman que se corrijan algunas cuestiones técnicas.