Marisa Sánchez Bellerín: Vive y trabaja en Bruselas, pero es más de Huelva que un choco

Marisa nació en ese tramo de calle que ahora a se llama Jesús Hermida pero que antes se le llamaba calle Aragón muy cerca de la Plaza de la Merced y desde pequeña estudió en el Colegio Santo Ángel y de eso la conozco yo porque en ese mismo colegio estudió mi hija Cristina y a pesar de que ella se marchó a estudiar periodismo a Madrid y mi hija estudió ingeniería en Sevilla, se siguen viendo muy a menudo y ahora que coinciden las dos en Huelva, me dice mi hija que le haga un reportaje a Marisa porque lleva una vida muy interesante y aquí estoy. También otro día si ella me deja se lo haré a Cristina que también se ha llevado muchos años trabajando por Europa.

Marisa es una chica joven muy divertida que se fue con una Beca Extenda con un convenido con la Junta de Andalucía y sus padres pensaban que al poco tiempo volvería, pero nunca pensaron que ella le iba a coger gusto a vivir en el extranjero y que incluso se iba a echar un novio alemán Bernhard Knoblauch, pero eso sí, socio del Recre igual que ella. Él es el único socio alemán que tiene muestro Real Club Recreativo de Huelva, Decano del Fútbol español.

Marisa estudió en Huelva, en sus últimos años en nuestra ciudad, el curso de orientación universitaria en el (COU) Instituto Diego de Guzmán y Quesada situado junto al señero instituto La Rábida y que en Huelva se le conoce como “El Femenino” y allí fue donde decidió hacerse periodista y para ello se marchó a la capital de España a la Universidad Complutense.

Hoy vive en Bruselas haciendo un programa para la Comisión Europea, pero antes ejerció el periodismo en Madrid donde hizo televisión, también trabajó para Sociedad General de Autores (SGAE) en Sevilla, después se marchó durante un año a trabajar a Córdoba, todo esto antes de recalar para trabajar como periodista en la Unión Europea, donde se fue con una beca

Está encantada de su trayectoria y con su situación actual y sus padres a los que conozco hace mucho tiempo me paro con ellos siempre que nos vemos por Huelva o por Punta Umbría, me cuentan algo de ella y cuando vendrá y es que Marisa le gusta tanto Huelva que viene cada vez que puede porque según me cuenta, le encanta la luz de Huelva, es tan diferente a la de cualquier lugar que le apasiona, esos celestes de la mañana y los rosas de los atardeceres.

Fernando, su padre y su esposa y también a veces su hijo también llamado Fernando van mucho a Bélgica a ver a su hija y lo pasan muy bien porque allí hay una gran vida cultural y concretamente donde vive Marisa es una ciudad poco mayor que Huelva, pero llena de encanto, de museos, del parlamento europeo y del gobierno.

Pero la verdad es que cuando Marisa viene a Huelva, disfruta a tope porque nuestra provincia tiene miles de cosas que no las tiene la ciudad belga donde vive ella.

Ella trata de venir también en Semana Santa sobre todo para estar en Huelva el Jueves Santo y salir en la procesión de la Hermandad conocida vulgarmente como la de los Judíos ya que ella pertenece a ella al igual que sus sobrinos y disfruta mucho realizando estación de penitencia en esta antigua hermandad onubense.

Procura, aprovechando cuando está en Huelva, hacer visitas culturales guiadas por Platalea, y así conoce lugares de Huelva a la perfección, ya que Diego, Jesica y los demás componentes de este magnífico grupo conocen y enseñan cada rincón onubense.

Podría seguir contando cosas de Marisa Sánchez, pero se me acaba el espacio. Otro día contaré sus trabajos como responsable de comunicación de LIFE.

El otro día me decía un amigo que escriba algo de alguna mujer interesante y aquí va, Marisa Sánchez Bellerín una mujer joven, guapa, muy culta y que desarrolla un trabajo interesantísimo en la Unión Europea y que además es de Huelva y la ama.