El delegado territorial de Regeneración, Justicia y Administración Local de Huelva en funciones, Alfredo Martín, visitó Cabezas Rubias para conocer las obras que ejecuta el Ayuntamiento en las antiguas casas del médico y del maestro para su explotación como alojamiento rural, fomentando así la actividad turística en el municipio “una industria llamada a jugar un papel fundamental en la lucha contra la despoblación en la provincia”.

En concreto, la rehabilitación de la casa del médico se está realizando con fondos del Programa de Fomento de Empleo Agrario (PFEA), con una aportación de la Junta con 51.392 euros en total para estas obras y trabajos de urbanización en diferentes calles del municipio. No obstante, el Ayuntamiento también tiene previsto intervenir en la antigua casa del maestro, un proyecto que presentó a la convocatoria de subvenciones de la Consejería de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local dirigida a municipios de menos de 20.000 habitantes con problemas de despoblación. En este caso, la ayuda, que actualmente se está tramitando, asciende a 30.000 euros.

Martín, que se reunió con el alcalde, Rafael González, pudo ver parte de las actuaciones que se están realizando, y subrayó la importancia de la colaboración entre administraciones “para ayudar a las entidades locales a mejorar infraestructuras y servicios públicos y acometer proyectos que solos no podrían”.

Puso en valor iniciativas como las del Ayuntamiento de Cabezas Rubias para poner en marcha proyectos que generen actividad económica, y con ello empleo, a medio y largo plazo, además de los contratos que se crean durante las obras, 90 en el caso del PFEA en Cabezas Rubias, “una cifra nada desdeñable para un municipio de alrededor de 740 vecinos”.

Martín defendió la “apuesta por el municipalismo” del Gobierno andaluz con “iniciativas pioneras para frenar la despoblación que en Huelva afecta especialmente a los municipios de la Sierra de Aracena y el Andévalo”. En este sentido, recordó que la Consejería de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local fue la primera que, ya en 2021, puso en marcha una línea de ayudas en régimen de concurrencia competitiva en la que “por primera vez se tienen en cuenta entre los criterios de reparto la densidad de población, el crecimiento demográfico y vegetativo o el índice de envejecimiento para primar a los municipios con riesgo de despoblación”.

“El objetivo es ayudar a los ayuntamientos a mejorar equipamientos públicos y desarrollar proyectos que generen oportunidades laborales para fijar la población al territorio, como en este caso las casas rurales que está promoviendo el consistorio ante el auge del turismo de interior”, concluyó.