El juez imputa al alcalde y a otros cinco ediles del PSOE por el caso Ibercons

El alcalde de Punta Umbría, Gonzalo Rodríguez Nevado, otros cinco miembros del equipo de gobierno del PSOE, además del asesor del Ayuntamiento, Juan Pomares, y del arquitecto técnico municipal, tendrán que comparecer ante la autoridad judicial por el conocido como caso Ibercons.

Tres meses después de que el Juzgado de Instrucción número 4 de Huelva admitiera a trámite la querella criminal interpuesta por la empresa Ibercons Ingeniería y Construcciones por los delitos de amenazas, alteración del precio de subastas y concursos públicos, prevaricación, falsedad documental y fraude en la contratación, se confirma que la autoridad judicial imputa al alcalde y a los concejales socialistas y pone fecha a su cita ante el órgano instructor, por el que irán pasando a partir del 26 de enero del próximo año.

Según relata la empresa en la querella, el gobierno municipal trató presuntamente de desplazar a Ibercons de la adjudicación de las obras de la plaza de la Sal, ubicada en El Portil, en beneficio de la empresa Punta Enebro, que presentó para las obras un presupuesto mayor y con un plazo de ejecución superior a los que la querellante incluía en su oferta.

Concretamente, la propuesta de Ibercons ascendía a 127.915,27 euros y contemplaba un plazo de ejecución de cuatro semanas desde la fecha de inicio, mientras que Punta Enebro elevaba el precio a los 130.162,52 euros por la misma obra, a realizar en 55 días.

Una vez que el Ayuntamiento conoció la propuesta de Ibercons, el técnico municipal, J.C.T.C., citó al director técnico de la empresa, Juan Carlos Trigueros Cortés, a una reunión en el despacho del concejal de Urbanismo, Juan Iglesias, que se celebró (noviembre de 2008) también con la presencia del asesor. En total, en aquel despacho se reunieron tres de los querellados y el representante de Ibercons con la intención de "persuadir" a este último para que renunciara a la adjudicación que le correspondía por haber presentado la oferta más ventajosa.

En el transcurso de aquel encuentro, Pomares aclaró a Trigueros que le pedía "un favor político", para que se retirara, y confirmó que de esta petición tenía conocimiento el propio alcalde, ya que la adjudicación de Punta Enebro era "un compromiso adquirido" por él mismo.

El representante de Ibercons, que grabó las conversaciones que se mantuvieron en la reunión, dio un no por respuesta, a la que Pomares reaccionó -señala la querella- con amenazas. "Es un favor que te pedimos políticamente -dijo textualmente Pomares-. Tú has trabajado mucho en este Ayuntamiento y si quieres seguir trabajando, pues los piensas y lo ves...". Ibercons se mantuvo inamovible en su posición de no retirar la propuesta y cinco meses después conoció de la inminente inauguración de las obras en la Plaza de la Sal, tras la aprobación en Juntade Gobierno. La empresa llamó al Ayuntamiento y recibió una notificación por fax en el que se daba cuenta de la supuesta renuncia de Ibercons a tomar parte en la licitación por motivos técnicos internos de la empresa, que la misma empresa desconocía.

Tras varias semanas, Trigueros comprobó que tal documento de renuncia no había sido presentado por Ibercons y que su firma no era la que figuraba y había sido presuntamente falsificada.