Las fiestas repuntan con ocho agrupaciones en el concurso carnavalero
La Elisa Marín recibe su corona de reina y devuelve la luz a las Carnestolendas · Ocho jóvenes forman la corte
El Carnaval de El Campillo vuelve a tener corte de reina y damas en 2011. La joven Elisa Marín Ganado, de 14 años, recogió el viernes la corona que ha lucido Mari Ángeles Valiño Díaz durante los dos últimos años como consecuencia del paréntesis de 2010, cuando quedó desierto el trono de las carnestolendas del núcleo salvocheano.
La fiesta de la libertad, de la sátira y la ironía, de la crítica, de la participación, ha recuperado su máximo esplendor, la luz de su emperatriz, en esta edición, en la que las ocho agrupaciones (cinco comparsas y tres chirigotas) que se han subido al Teatro Municipal Atalaya (cifra que se repite por segundo año consecutivo después de que llegara a caer a cuatro), tres de ellas femeninas, han podido dedicarle letrillas a la hermosura de la sultana.
Este repunte de la vitalidad del consolidado carnaval campillero ha abierto la puerta, en paralelo, al surgimiento de una nueva comparsa o chirigota, pues la alfombra roja reservada a la corte de las carnestolendas se ha convertido en las últimas ediciones en una verdadera plataforma de lanzamiento a las tablas. Las dos últimas reinas, junto a sus damas, integran hoy la agrupación que debutó el pasado curso bajo el tipo de bailarinas y el nombre 'Desde un sueño'. Como ellas mismas aseguran, las formaciones actuales recibirían a sus sucesoras con los brazos abiertos, en el marco del espíritu de solidaridad y compañerismo que define a la enraizada fiesta de febrero en la localidad minera.
Las acompañantes de Elisa Marín Ganado, en esta experiencia "inolvidable", son Alba Gregorio Tovar, las hermanas Candela y Rocío Suárez Matos, Inés José Rivera, Triana Gómez Domínguez, Valeria Sánchez González, María Álvarez Calvo y Lucía Romero Román. Sobre estas nueve bellas adolescentes estuvieron puestas todas las miradas en la apertura de la fiesta de febrero. Una coronación que dio paso al pregón del que fuera integrante de unas de las tres agrupaciones, Los ángeles y demonios del lugar, que dotaron de color al renacimiento de los carnavales salvocheanos en 1984, tras la conclusión del silencio establecido por el franquismo, el también secretario general de UGT-Huelva, Jorge Puente.
Una vez cortada la cinta de las carnestolendas, las mazas y los palillos empezaron a hacer sonar bombos y cajas al ritmo de las guitarras y las voces de los carnavaleros, algunos de ellos con más de 20 años de experiencia sobre el escenario, recitaron, envueltos en su disfraz, las letrillas con las que se convertían en portavoces del pueblo para enjuiciar la realidad que rodea tanto a El Campillo como al resto de la Cuenca Minera.
Algo que cobra más trascendencia aún si se tiene en cuenta la proximidad de una nueva cita con las urnas. Las denominaciones con las que las ocho agrupaciones rinden tributo a Don Carnal son: Ande yo caliente, Por una limosna, Fantasía de Carnaval, Al-Ándalus, Te vas a quedar de piedra, Desde el desván, Comuna Cabra y Después de comer no sé cómo nos puedes ver.
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