Golfo de cádiz

La facturación de las lonjas de pesca de Huelva baja un 15% en 2017

  • El volumen de capturas disminuye un 29% debido a la reducción de las cuotas de marisco, pescado y molusco

  • Isla Cristina es la que obtiene mayores rendimientos a pesar de la bajada

El volumen de facturación de las lonjas de pesca de Huelva descendió en 2017 un 15% respecto al año anterior y las capturas se redujeron un 29%, según datos de la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural consultados por este periódico. Esta reducción ha venido motivada principalmente por un descenso en la cantidad de mariscos, pescados y moluscos capturados, un parámetro que se ha repetido en todas las lonjas del Golfo de Cádiz. En concreto, la facturación onubense alcanzó el pasado año los 44,84 millones de euros y un volumen de 17,94 millones de kilos, frente a los 52,83 millones de euros y los 17,94 millones de kilos de 2016.

En facturación, la lonja onubense que experimenta el mayor descenso es Punta Umbría con un 23%, al pasar de los 9,4 millones de euros de 2016 a los 7,25 del pasado año. Le siguen Huelva con un descenso del 21%, Isla Cristina con un -14% y Ayamonte con un -10%.

52,83Millones. Es la facturación por venta en los puertos onubenses durante el psado año

La lonja que obtuvo la mayor facturación en 2017 fue Isla Cristina con 25,45 millones de euros, seguida de Ayamonte (10,85 millones), Punta Umbría (7,25 millones) y Huelva (1,27 millones).

En cuanto a las capturas, el puerto de Isla Cristina fue el que registró el mayor volumen con 6,61 millones de kilos, pero fue al mismo tiempo el que experimentó el mayor descenso con un 37% respecto a 2016, cuando la cantidad de productos pescados fue de 10,43 millones de kilos. Punta Umbría fue la segunda lonja onubense en capturas con 3,79 millones de kilos y una reducción del 17% respecto a 2016, y Ayamonte registró un volumen de 2,17 millones de kilos (-19%) y Huelva 174.246 kilos, lo que supone un 27% menos que el año anterior.

Estas cifras hacen que el sector pesquero de Huelva que faena en el Golfo de Cádiz califique de "malo" el año 2017. Un de los motivos es la falta de cuotas para la captura de la sardina, cuya escasez motivó el cierre del caladero desde el 1 de septiembre; otro, que las lonjas hayan movido muy poco de este producto pesquero; también el descenso de las capturas del pulpo, que han pasado de 2,6 millones de kilos en 2016 a alrededor de 1,8 millones, y de la chirla, de la que sólo se han capturado 1,2 millones de kilos frente a los 2,8 de la anualidad anterior.

El precio medio de los productos del mar comercializados en las lonjas onubenses fue de 4,52 euros, siendo la de la Huelva la que alcanzó el mayor precio con 7,32 euros y Punta Umbría la que menos con 1,91 euros.

La facturación de las lonjas andaluzas descendió el pasado año alrededor de un 4% respecto al anterior, y sus capturas alcanzaron un valor de unos 150 millones de euros. La cantidad de mariscos, pescados y moluscos capturados descendió un 17,6%, entre un año y otro; 56,6 millones en 2016 y 48,2 millones en 2017.

El descenso en ambos parámetros a nivel regional ha estado motivado por la bajada experimentada por las lonjas del arco suratlántico, es decir, las ubicadas en el Golfo de Cádiz, ya que las localizadas en el Mediterráneo (provincias de Almería, Granada, Málaga y parte de Cádiz) aumentó.

Concretamente, en esta última zona las capturas pasaron de 15 millones en 2016 a 1,73 millones más en 2016, lo que se ha traducido en un incremento de la facturación, que se ha situado en casi 56 millones frente a los 50 de la anualidad anterior.

Por lo que respecta a las lonjas de la región suratlántica ubicadas en el Golfo de Cádiz, han experimentado un descenso significativo respecto a 2016 tanto en capturas como en volumen de ventas, motivado por la escasez de sardinas, pulpo o chirlas, entre otros productos.

Así, el valor de producción pesquera ha pasado de los 106 millones de euros en 2016 a poco más de 94 millones en 2017, lo que supone un descenso de casi el 13%.

La bajada en este caso viene acompañada también de una reducción de las capturas, ya que de los 41,8 millones de kilos vendidos en 2016 se ha pasado a 30,8 millones.

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