Un solo embalse en la provincia, el de Los Machos en Cartaya, supera el 50% de capacidad después de las últimas lluvias. Con un porcentaje del 67% sobre su capacidad total (unos 12hm3), el más pequeño de los depósitos onubenses, se ha convertido en el más beneficiado tras el paso de Celine y Bernard, según los datos del observatorio de recursos hídricos de la Junta de Andalucía. 

El embalse, dedicado principalmente al riego agrícola, no ha sido el único que ha recibido un ligero respiro en cuanto a la mejora de sus recursos hídricos en las últimas semanas. El embalse del Jarrama de Nerva, con una capacidad máxima que ronda los 43hm3, es otro de los pequeños embalses que más agua han logrado embalsar. En concreto, este depósito, dedicado al riego y el abastecimiento urbano, ha hecho acopio en las últimas horas de 18,51hm3, un 43,45% sobre su capacidad real. 

Por su parte, el embalse del Piedras, con una capacidad total de casi 60 hm3, se sitúa ya en un 41,14% sobre su capacidad máxima. Lamentablemente, no todo son buenas noticias para los pequeños embalses onubenses, el segundo con menor capacidad, Corumbel Bajo en La Palma del Condado, uno de los espacios más afectados por la sequía, sigue estando apenas a un 16,22% después de las últimas lluvias, con 2,92 hm3. 

Los grandes embalses recuperan el ritmo

En cuanto a los embalses de mayor capacidad de la provincia, el panorama es similar. El mayor depósito de Huelva, el embalse del Andévalo, ubicado entre El Granado y la Puebla de Guzmán, con una reserva total de 634,4 hm3, mantiene actualmente un máximo de 156,06 hm3, lo que reporta un 24,60% de su capacidad. Mejor previsión tiene el embalse del Chanza, un pantano de gravedad, que se sitúa tras las últimas lluvias al 41.70% con 142.38 hm3 sobre un total de 341,4 hm3. 

Tal y como sucede en las pequeñas instalaciones, el embalse de Zufre, dedicado al abastecimiento urbano y al uso hidroeléctrico, principalmente, no es uno de los más beneficiados por los últimos temporales. En concreto, esta pequeña instalación construida a comienzos de los años 90, ronda un 12% de capacidad total con una reserva de 20,2 hm3 en las últimas 24 horas.  

Tampoco el embalse de Aracena ha sufrido grandes avances. Con una capacidad total de 126,8 hm3, apenas ha superado un 20% de su capacidad total (19,91%) a causa de unas reservas que se sitúan en 25,25 hm3. 

Con todo, Huelva se queda lejos de lograr unos recursos hídricos suficientes como para salvar las restricciones referentes a la declaración de situación de excepcional sequía en la demarcación hidrográfica del Tinto, Odiel y Piedras que entrará en vigor a partir del próximo 15 de noviembre si el panorama no cambia. Entre dichas restricciones se encuentra la reducción del volumen de riego de un 50% en el uso agrario que mantiene en vilo a agricultores de toda la provincia. 

Evolución del agua embalsada

Con referencia a los datos registrados en la última semana, los embalses en los que se ha producido una mayor variación han sido los pantanos de Los Machos con un 36% y +3,95, Zufre con 32,88% y +4,85 y Piedras 17,38% con +3,56. Le siguien los embalses de Aracena con 15,14% y una variación de +3,27, Jarrama con 10,63% y +1,73.  A la cola, con una evolución menor en cuanto al agua embalsada según los datos de la Junta, Chanza (4,45% y +6,04) y Corumbel Bajo (3,69% y +3,69). 

Con respecto al pasado año, aún se están recabando datos concluyentes sobre el grueso de los embalses. Por ahora se conoce que la variación de las reservas es positiva en el embalse de Aracena con un porcentaje de variación del 3,71% mientras que es negativa en el de Zufre -38.03%.