Los héroes de la pandemia celebraron ayer su día. El don de acompañar, cuidar y querer a las personas de los profesionales de enfermería justifica la necesidad imperiosa de reconocer el esfuerzo físico y mental de un colectivo que tiene ante sí el mayor reto de la historia reciente.

La Covid-19 ha colocado a la profesión en el foco, pero “el trabajo y la dedicación de los enfermeros son los mismos que antes de la irrupción del virus”, señala a esta redacción el presidente del Colegio Oficial de Enfermería de Huelva, Gonzalo García. En este sentido, agradece las “innumerables muestras de cariño” que la sociedad onubense brinda diariamente a sus guerreros, los que están en primera línea de batalla, dado que “recibimos cartas, mensajes o dibujos de toda la población, en los que ponen de relieve nuestro trabajo”, sostiene García.

La pandemia ha evidenciado el sacrificio y la entrega de los sanitarios, quienes, no solo han lidiado con el virus, sino también con el miedo a contagiar a sus familiares, pacientes cuya luz se apagaba y no podían despedirse de sus familiares por las restricciones sanitarias o con la incertidumbre acerca de la seguridad que brindaban los equipos de protección al comienzo de la epidemia.

“Ahora el escenario es totalmente diferente”, reconoce Gonzalo García, quien recuerda que, al principio, reinaban “las dudas acerca de los tratamientos que debían seguir los pacientes”. “Ahora vamos por delante y, por suerte, gozamos de una mayor comodidad y protección a la hora de trabajar”. De hecho, “hemos conseguido vacunarnos y, por consiguiente, aliviar todos esos miedos a contagiar a nuestros allegados”, afirma el presidente del Colegio de Enfermería.

Pese a que la mejoría es palpable, García es sabedor de que, una vez finalice la pandemia, serán muchos los enfermeros con secuelas psicológicas. De ahí que el Colegio contempla una batería de iniciativas para ayudar a todos estos profesionales.

Aprovechando el Día Internacional de la Enfermería, desde el colegio se pide a las autoridades pertinentes una “mayor ayuda económica”, así como acceder en la clasificación administrativa a A1, una categoría que “nos permitiría competir en igualdad de condiciones con otras profesiones a la hora de acceder a puestos de gestión”.

En este punto, los sindicatos también emplearon la jornada de ayer para, además de agradecer a los enfermeros su labor, dar voz a las principales reclamaciones de los mismos.

Satse pidió a la administración andaluza que establezca una previsión real de las necesidades de personal para garantizar que los centros sanitarios onubenses cuenten con enfermeras y enfermeros suficientes para hacer frente al incremento del ritmo de la campaña de vacunación sin necesidad de reducir el resto de la actividad asistencial diaria.

Del mismo modo, recordó que llevan meses demandando la adecuación de las plantillas de enfermeras de Atención Primaria para que la asignación de población por cada enfermera no supere los 1.500 habitantes. Con este objetivo, sería necesario incrementar en más de 4.100 enfermeras la plantilla de primaria en toda Andalucía, de ellas unas 260 en Huelva, sólo para la Atención Primaria.

Por su parte, CSIF explicó que aboga por “una revisión de las competencias y funciones por categorías, además de la equiparación salarial en los diferentes servicios de salud”. Entre otras reivindicaciones, el sindicato también destacó el desarrollo actualizado de la formación con nuevas titulaciones en especialidades: Enfermería de cuidados intensivos y críticos; de urgencias y emergencias; de nefrología y diálisis; cuidados paliativos y oncológicos, Escolar y de Enfermería médico-quirúrgica, entre otras.