Frontera Líquida es el eslogan más reciente con el que Ayamonte, Vila Real de santo António y Castro Marím están promocionando los atractivos turísticos de la Eurociudad del Guadiana.

Una característica que hace este paso fronterizo entre Huelva y el Algarve más permeable que nunca, atendiendo a la economía doméstica de los habitantes de ambos lados de la frontera, teniendo en cuenta los actuales momentos de incertidumbre en toda Europa por el alto precio de los carburantes, y particularmente en España por la huelga de transportes y la consecuente falta de determinados productos en términos de economía doméstica.

Y es que el trasiego de uno a otro lado del puente internacional por parte de ciudadanos lusos que acuden a España a repostar combustible o adquirir bombonas de gas, y de españoles que cruzan la frontera en sentido opuesto para proveerse de productos frescos en los supermercados portugueses de Vila Real, está siendo desde hace aproximadamente una semana más intenso que nunca.

Movimiento siempre hay, especialmente los fines de semana, según coincidieron en señalar este sábado a Huelva Información tanto responsables de algunas de las gasolineras de Ayamonte más frecuentadas por ciudadanos lusos, como en la otra orilla del Guadiana los encargados de los principales supermercados portugueses más visitados por españoles, a lo que añadieron que "desde hace una semana se ha notado un notable incremento de visitas".

En el caso de las gasolineras ayamontinas la situación era este sábado de relativa normalidad en comparación con el pasado fin de semana, cuando los precios de los carburantes alcanzaron su pico más alto. Entonces, en algunos de los surtidores hubo colas de varios centenares de metros porque "aunque el precio del combustible y el gas es siempre más alto en Portugal que en España, la subida de tal calibre que se produjo en toda Europa en tan pocos días generó mucha incertidumbre entre los consumidores". Así lo indicó el responsable de una de las gasolineras, quien no obstante precisó que "no llegó a haber psicosis entre los clientes, ni desabastecimiento en los establecimientos".

Varios vehículos portugueses repostan combustible en una gasolinera de Ayamonte, este sábado

"Ahora -añade- la suavización de los precios de los últimos días ha hecho que la situación se normalice", aunque según concluye "siguen siendo muy altos", por lo que "pedimos medidas urgentes para abaratar el coste de los carburantes porque esta situación no ayuda a que se recupere la economía".

En el caso de los supermercados portugueses, encargados de algunos de ellos precisaron que "se ha notado un aumento de españoles" que han acudido a comprar "sobre todo productos frescos y especialmente frutas y verduras, así como también aceite de girasol". Un incremento que, según añaden, "se ha notado bastante durante los días laborables de esta semana, ya que los sábados y domingos es normal que vengan muchos españoles".

Por otra parte indican que los españoles suelen comprar en Portugal "sobre todo mantequilla, quesos, pan o bacalao salado, y no tanto productos frescos, como está sucediendo estos días".

Los productos frescos no han faltado en los lineales de los supermercados portugueses

Finalmente han señalado que, "si bien no ha llegado a haber desabastecimiento, sí se ha notado que al final del día han faltado determinados productos frescos en los lineales por la mayor presencia de españoles, pero se han ido reponiendo diariamente porque aquí no tenemos los problemas de transporte que hay en España".