Pesca

La parada biológica de la chirla en el Golfo de Cádiz termina mañana

  • Tras un mes sin salir a faenar con el objetivo de conservar y regenerar el caladero, el próximo lunes las 115 embarcaciones que se dedican a la captura de la chirla volverán a echarse a la mar.

La parada biológica de la chirla en el Golfo de Cádiz terminará mañana después de un mes sin salir a faenar, por lo que el próximo lunes podrán a volver a la mar tras el descanso obligatorio del sábado y el domingo, según explicó el presidente de la Federación Andaluza de Cofradías de Pescadores, Manuel Peinado.

Según acordó la Comisión de Seguimiento de la pesca de la chirla --integrada por representantes de la Consejería de Agricultura y Pesca, de las Asociaciones de Armadores y de las Cofradías de Pescadores de Ayamonte, Isla Cristina, Punta Umbría y Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), así como miembros de la CEA, UGT-A y CCOO-A-- en su Plan de Gestión acordado el 18 de enero, la parada ha durado un mes con el objetivo de conservar y regenerar el caladero.

Esta parada se suma a la que se comenzó el 25 de enero y duró dos meses con una subvención a armadores y a tripulantes de 2,2 millones de euros. En esta ocasión, la subvención a armadores se realizará en función al tonelaje del barco y a los días hábiles que los buques dejan de pescar. Por su parte, las ayudas de los tripulantes cubren el mes de parada a razón de 36,7 euros por día.

La captura de la chirla la realizan 115 embarcaciones en las que trabajan cerca de 400 tripulantes. Pueden capturar chirla hasta un máximo de 200 kilos por barco y día y el molusco debe cumplir con una talla mínima de 25 milímetros.

El Plan de Gestión se completa con un estudio integral de esta pesquería que realizará el Instituto Español de Oceanografía de dos años de duración donde, además de los índices de crecimiento, reproducción y mortandad de la chirla, analizará el patrón de explotación y esfuerzo pesquero al que esta sometido el caladero, los parámetros ambientales, entre otros.

En 2007, el Plan para la chirla del Golfo de Cádiz estableció unas ayudas a la paralización temporal de esta flota, desde el 1 de abril hasta el 31 de mayo de 2007, por un importe de 625.042,42 euros, de los cuales 249.094,42 euros se destinaron a los armadores (116 barcos) y 375.948,00 euros para 323 tripulantes.

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