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Aumentan las medusas en las playas de Mazagón

Aumentan las medusas en las playas de Mazagón

Aumentan las medusas en las playas de Mazagón / Jordi Landero (Mazagón)

Los bañistas que se encuentren estos días en las playas de Mazagón tendrán que andarse con ojo. Según confirman desde Protección Civil y desde el Ayuntamiento de Palos de la Frontera, ha aumentado la afluencia de medusas en las playas. 

Durante estos días han sido varios los ciudadanos que han alertado de la presencia de estos animales marinos en la zona de Mazagón a través de redes sociales. Algunos, incluso, hablaban de la posibilidad de que se tratase de la carabela portuguesa, una especie más peligrosa a la que se ve comúnmente en las zonas costeras y cuya picadura puede provocar intenso dolor, problemas respiratorios e incluso una parada cardiaca. Si bien es cierto que hace años en el término costero apareció una plaga de esta especie, en estos momentos desde el Ayuntamiento de Palos aseguran que no es así, "que a pesar de haber una mayor concentración estos días de medusas, no son de las peligrosas".

Desde el Ayuntamiento de Palos aseguran que "ya están trabajando en la retirada de las medusas". Cuatro operarios con un tractor comenzaron el pasado jueves con los trabajos y seguirán limpiando toda la costa durante los próximos días, desde la zona de Las Dunas, hasta La Estrella y la playa del Vigía. Con todo, tanto Protección Civil como el Ayuntamiento piden precaución a los bañistas, ya que, dicen, las mareas durante el día podrían traerlas de nuevo hacia la orilla.

¿Qué hacer ante la presencia de medusas en Huelva?

La Consejería de Salud y Consumo ha elaborado un conjunto de recomendaciones sanitarias para el período de estival y, precisamente, uno de los apartados es el relativo a las picaduras de medusas, difíciles de detectar por su aspecto transparente. 

El primer consejo que proporciona la consejería contempla la rigurosa atención a la información suministrada por las autoridades y socorristas sobre la presencia de medusas en las playas. Algunas costas disponen de una bandera específica, además de las tradicionales roja, amarilla y verde, referentes a la peligrosidad de la zona de baño. 

Del mismo modo, explican que al contacto, la medusa desprende unas células urticantes que tienen veneno en su interior, y que con solo el roce producen efectos leves, normalmente, aunque muy molestos. La persona que sufra la picadura sentirá dolor y ardor inmediatos, seguido de inflamación, enrojecimiento y sangrado.

Una vez que el bañista sienta que ha sido picado por una medusa, la primera recomendación de Salud y Consumo es salir del agua lo antes posible para, seguidamente, limpiar la zona afectada por la picadura con agua salada o suero fisiológico. De hecho, nunca se debe utilizar agua dulce ya que podría romper las células urticantes, agravando el problema. Asimismo, si hay algún resto de tentáculo adherido a la piel, hay que quitarlo cuidadosamente con unas pinzas.

Tras ello, es necesario aplicar frío con un paño durante unos 15 minutos y nunca se debe frotar la zona con toallas, arena, ni otros objetos. Es importante acudir al puesto socorro, donde podrán administrar un antihistamínico y/o un analgésico si fuera necesario, o bien trasladar a la persona a un centro médico si fuera preciso.

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