La vecina de Cartaya de 67 años que el pasado domingo fue víctima de una paliza en su domicilio y que fue ingresada en el Hospital Infanta Elena de la capital provincial recibió a media mañana de ayer lunes el alta médica tras evolucionar favorablemente de sus heridas.

Así lo confirmó a Huelva Información su hija, Carmen Pavón Pereira, quien avanzó que los agresores sustrajeron de la casa de su madre tres sobres con dinero que tenía escondidos en diferentes puntos: uno con más de 500 euros, otro con 400 y otro con 600, además de algunas joyas.

Sobre las heridas de la anciana, la hija ha precisado que sufrió derrame cerebral, fractura craneoencefálica, rotura del tabique nasal, daños en un ojo, cortes en una ceja, un pómulo dañado y hundimiento de las costillas, como consecuencia de los fuertes puñetazos que le propinaron tras atarla al cabecero de la cama por las manos y por el cuello con un pañuelo.

Carmen Pavón también ha señalado que no sabe aún cómo afectará esto a la salud de su madre, la cual "estaba fatal" antes de la paliza, por lo que había sido ya intervenida hasta en tres ocasiones de la espalda en los últimos meses, además de estar pendiente de una cuarta intervención por la misma dolencia.

La hija de la mujer agredida también ha precisado que la familia esta "hundida" tras los acontecimientos del domingo, y que "aún no nos lo creemos ni nos lo explicamos porque mi madre siempre ha sido una persona muy prudente". En el caso del marido de la agredida, su propia hija afirmo que "desde el domingo está como ido, como en estado de shock".

La mujer agredida tuvo que ser ingresada a primera hora del domingo en el Hospital Infanta Elena tras sufrir una paliza en el interior de su domicilio.

Los hechos tuvieron lugar sobre las siete y cuarto de la mañana en su domicilio, una vivienda de dos plantas situada en el número 69 de la calle Lepe, donde estaba sola, según indicó a esta redacción esa misma mañana su hijo, José María Pavón.

Este último añadió que se sospecha de dos varones jóvenes que actuaron "a cara descubierta". Igualmente indicó que todo apuntaba al robo como móvil de los hechos, ya que según sus palabras la casa fue hallada "patas arriba" y "registrada de arriba abajo".

El propio José María Pavón añadió que los agresores entraron en la casa su madre "saltándo por la azotea desde la calle trasera de la vivienda, sorprendiéndola dormida en la cama", donde "fue atada por las manos y el cuello al cabecero" y posteriormente "golpeada en la cara, la cabeza y los ojos a base de fuertes puñetazos".