El canal de Trigueros, básico para el riego de Alcolea, se licitará en un mes

La construcción de la presa de Alcolea dará un paso clave este próximo mes de noviembre, con la licitación de las obras del canal de Trigueros. De esta forma se dará salida a una infraestructura imprescindible para conducir en el futuro las aguas superficiales de riego desde el embalse las explotaciones agrícolas de destino.

El anuncio de la licitación fue realizado ayer por la directora general de la sociedad estatal Aguas de las Cuencas de España (Acuaes), Aránzazu Vallejo, en su visita a las obras de Alcolea, coincidiendo con el comienzo de los trabajos de hormigonado del cuerpo de la presa, con una inversión prevista superior a los 89 millones de euros.

Vallejo señaló que el objetivo es que se pueda ir "solapando" la conclusión de las obras de la presa con las actuaciones para la construcción del canal de Trigueros, que "debe ir también en paralelo con la organización de los regantes en comunidades", con el fin último de que se pueda regar cuanto antes y no suceda como con la presa del Andévalo, cuya construcción concluyó hace ahora una década sin que por el momento sus aguas hayan podido regar por la falta de conducciones, aseguró.

El director general de Dominio Público Hidráulico de la Junta de Andalucía, Juan Serrato, aseguró sobre este tema que el Gobierno autonómico va igualmente a "apoyar" una infraestructura "imprescindible para la posterior distribución del agua de riego por toda la zona de influencia de la presa", y que ha sido presupuestada en 87 millones de euros.

Con el hormigonado del cuerpo principal, la presa de Alcolea va camino de ser una realidad para transformar en regadío con agua superficial un total de 22.000 hectáreas de una quincena de municipios de las comarcas del Andévalo, la Campiña y el Condado Norte: Alosno-Tharsis, Zalamea la Real, Calañas, El Cerro de Andévalo, Villanueva de las Cruces, Valverde del Camino, Beas, Villalba del Alcor, La Palma del Condado, Villarrasa, Niebla, San Juan del Puerto, Trigueros, Huelva (La Ribera-Peguerillas) y Gibraleón.

Esta superficie se verá implementada de forma paralela con la puesta en riego de otras 5.000 hectáreas gracias a las aguas subterráneas del acuífero Masa Niebla.

En total, la presa beneficiará a los 1.815 agricultores que por el momento han manifestado su intención de transformar, pertenecientes a las Comunidades de Regantes del Andévalo Fronterizo y Andévalo Minero, ambas integradas en la Junta Central de Usuarios de Alcolea y Acuífero Masa Niebla, que inició su proceso constituyente en Gibraleón el pasado día 13 de octubre.

Al acto de inicio del hormigonado del cuerpo de la presa asistieron ayer, además de Aránzazu Vallejo y Juan Serrato, la alcaldesa de Gibraleón, Lourdes Martín; el representante de la Junta Central de Usuarios de Alcolea y Acuífero Masa Niebla, Juan Antonio Millán, así como alcaldes varios de los municipios del área de influencia de la presa, entre otras autoridades.

Los trabajos de hormigonado se han iniciado una vez ejecutada la excavación y limpieza de la cimentación del bloque, así como la ataguía de desvío del río Odiel y está previsto que concluyan, dando prácticamente por finalizadas unas obras que se iniciaron en el año 2012, en marzo de 2017. En dicho hormigonado se emplearán un total de 329.000 metros cúbicos de hormigón vibrado.

Durante la visita, Vallejo resaltó la importancia de los trabajos iniciados este jueves al ser la presa de Alcolea una actuación "largamente demandada, con más de 20 años de tiempo de maduración, no exenta de problemas, pero por la que ha habido una apuesta clara por parte del Gobierno".

"Decir que el agua es riqueza es algo que tenemos todos claro, y es lo que la presa de Alcolea aportará a esta zona, riqueza en la agricultura, en la industria y una mejora de los abastecimientos que se encuentran aguas abajo", señaló la reopresentante del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.

El director general de Dominio Público Hidráulico de la Junta de Andalucía, Juan Serrato, reiteró a su vez que el inicio del hormigonado supone un "hito", tras 20 años de trámites administrativos. Es por ello por lo que indicó que "el proceso ya no tiene marcha atrás".

Igualmente manifestó la satisfacción del Gobierno andaluz, que financia las obras al 50% junto con el Gobierno central, así como indicó que los tres principales objetivos de la infraestructura son, en primer lugar la laminación de las aguas del Odiel, aportando seguridad a las localidades ribereñas ante el riesgo de avenidas en épocas de fuertes lluvias; en segundo lugar, la mejora de la calidad de las aguas del Odiel mediante la aplicación de medidas correctoras en las aguas contaminadas procedentes de antiguas minas abandonadas; y por último, propiciar la transformación al riego para agricultores de una quincena de municipios de la provincia.

La alcaldesa de Gibraleón, Lourdes Martín, destacó por su parte que, al margen de los "indudables beneficios" que la presa aportará a la agricultura de su localidad, y de la provincia en general, otro hecho a destacar son los numerosos puestos de trabajo que las obras van a generar en Gibraleón durante el año y medio que resta para su conclusión.

En este sentido subrayó las "excelentes relaciones" existentes actualmente entre el Consistorio olontense y la empresa constructora, al objeto de aportar "toda la mano de obra posible para la ejecución de los trabajos".

Finalmente, y en nombre de los futuros regantes que se beneficiarán de las aguas de la presa para transformar sus explotaciones agrícolas, Juan Antonio Millán agradeció la "implicación" y el "compromiso" mostrado por las administraciones central y autonómica para la culminación de un proyecto "altamente demandado" por la agricultura onubense.

De este modo calificó de "histórico" el momento, por tratarse de la "recta final" de un proyecto "esperado y deseado", así como puso en valor la "unión" de ambas administraciones, y la "capacidad de inversión existente entre los futuros regantes, que están deseosos de contar con el agua de la presa para transformar sus tierras".

La presa de Alcolea, igualmente, permitirá la laminación de avenidas del río Odiel para aumentar la defensa de poblaciones y bienes, así como regular su caudal para un mejor aprovechamiento de las aguas del río.

En concreto, y según datos de Acuaes, el embalse, de 246 hectómetros cúbicos de capacidad, garantizará también el abastecimiento de agua a la ciudad de Huelva, atenderá las demandas industriales de la capital provincial, posibilitará el riego de cultivos tradicionales de la zona oriental de la provincia de Huelva y reducirá la carga contaminante del río Odiel mejorando su calidad. Esto será posible al permitir mezclar las aguas que discurren a lo largo del año con las de las riadas, reduciendo, inicialmente por dilución, y posteriormente por decantación, la carga contaminante de las aguas hasta valores admisibles.

Además, contribuirá con otros 135 hm3 anuales al sistema Andévalo-Chanza-Piedras-Alcolea.