La renovación del acuerdo pesquero entre España y Portugal, que regula la actividad de las flotas española y portuguesa en las aguas de ambos países y que expiraba el próximo 31 de diciembre, fue alabada ayer tanto por parte del sector pesquero como por la Junta de Andalucía. Gracias a la ampliación del convenio durante dos años podrán seguir faenando en la zona 55 barcos andaluces (unos 40 de ellos de Isla Cristina y Ayamonte).

Actualmente, 46 barcos que pescan con redes de cerco y artes menores, así como otras nueve embarcaciones de la modalidad de arrastre de fondo vienen accediendo a las licencias previstas en el acuerdo para faenar tanto en aguas continentales (fuera de las 12 millas) como en la frontera del río Guadiana y el Miño. En estos barcos trabajan unos 200 tripulantes cuyos ingresos dependen en gran medida de las posibilidades de pesca con Portugal. En total, beneficia a unos 250 buques españoles.

Por ello, el sector pesquero onubense expresaba ayer su satisfacción por la extensión del acuerdo. En declaraciones a Europa Press, tanto el presidente de la Asociación de Armadores de Punta del Moral, Alonso Abreu, como el presidente de la Cofradía de Pescadores de Isla Cristina, Mariano García, valoraban además que esta renovación permitirá "seguir negociando". "Más vale una prórroga de dos años que un mal acuerdo", consideró García.

Ahora toca seguir negociando un nuevo marco jurídico, para el que algunas de las propuestas del sector son el aumento de las licencias de marisco para los barcos de arrastre de fondo, la posibilidad de realizar descargas en puertos portugueses y que por vía terrestre llegue el recurso a las lonjas andaluzas, mientras que también es importante, destacó Abreu, que las embarcaciones españolas tengan acceso a zonas más cercanas a la costa.

Tras dejar claro que están "contentos" con la renovación conseguida por el momento, Abreu precisó que abogan por cuatro licencias más para marisco. En la actualidad hay cinco embarcaciones con licencias para crustáceos.

También la consejera de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Elena Víboras, ha valorado este martes la renovación del acuerdo bilateral de pesca entre España y Portugal firmado en Bruselas por los ministros de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, y el luso Assunçao Cristas.

"Se trata de una muy buena noticia, era un paso obligado, que repercutirá positivamente tanto en el sector del Golfo de Cádiz como en los municipios de la Costa Occidental de Huelva", señaló la consejera. "Nos alegra que las negociaciones se hayan resuelto satisfactoriamente, tal y como hemos venido solicitando en reiteradas ocasiones al ministro, y nuestra flota pueda seguir faenando en aguas lusas", explicó.

También la Junta mira ahora a la negociación del próximo convenio: "Vamos a seguir trabajando para que el Ministerio tenga en cuenta las demandas de nuestro sector con el objetivo de que las incluya en el próximo protocolo y se mejoren las posibilidades de pesca", señaló Víboras. Entre estas peticiones, destacan una mejor clarificación de la delimitación de la frontera, un aumento de licencia para pesca de crustáceos, poder faenar más cerca de la costa, así como que se les permita realizar descargas en puertos portugueses y trasladar la mercancía por carretera.

El texto rubricado el lunes en Bruselas tendrá una vigencia de dos años e introduce algunos cambios respecto a ediciones anteriores, en especial en lo que se refiere a las licencias recíprocas de pesca, con "mejoras" para España, según indicaron fuentes del Ministerio de Agricultura, Medio Ambiente y Alimentación. Además, añaden las fuentes, los dos años del acuerdo permitirán a las partes revisar las condiciones del intercambio de las posibilidades de pesca.

Entre las novedades destaca que la flota deberá aplicar las medidas técnicas del país en el que se realicen las pesquerías y se extiende a la modalidad de arrastre de fondo la prohibición de faenar durante el fin de semana que ya existía para el cerco.

También se consideran de obligado cumplimiento las reglas sobre límites de descartes que haya fijado la organización de productores del puerto de descarga, con independencia de la nacionalidad del buque o de la zona en que se hayan efectuado las capturas. Otro de los elementos del acuerdo es el refuerzo de la cooperación bilateral entre las autoridades de control e inspección de ambos países.