Apenas un puñado de votos han bastado al Partido Popular para lograr la Presidencia de la Mancomunidad de Servicios de la Provincia de Huelva (MAS) y, por tanto, el control sobre Giahsa. Después de estar en manos del Partido Socialista durante décadas, esta nueva votación deja un nuevo vuelco político en la provincia de Huelva como consecuencia de las elecciones municipales del pasado 28 de mayo.

Por el estrecho margen de siete votos, el candidato del PP y actual alcalde de Villalba del Alcor, Diego del Toro, se ha convertido en el nuevo presidente de la MAS, derrotando en el pleno de constitución de la MAS al candidato socialista y alcalde de Bonares, Juan Antonio García. El primero ha obtenido 192 sufragios, frente a los 185 del primero, registrándose seis abstenciones, que eran insuficientes para alterar el resultado.

La balanza la han decantado finalmente del lado popular los alcaldes y representantes municipales pertenecientes a formaciones políticas independientes de los ayuntamientos que forman parte de la MAS, pero muy especialmente el alcalde de Almonte, el exsocialista Francisco Bella (Ilusiona), cuyos 27 votos fueron para Diego del Toro. Más previsible era el sentido de los 18 votos de Punta Umbría, cuyo actual alcalde, el expopular y ahora independiente José Carlos Hernández Cansino (UPU) también mostró en el pleno su apoyo al candidato del PP.

Otros municipios importantes cuyo voto estaba claro para el PP, por contar con alcaldes de dicha formación, han sido Aljaraque (24 votos), Ayamonte (23), siendo también muy determinantes para los populares, sobre todo teniendo en cuenta las circunstancias en que se han constituido ambos ayuntamientos, los nueve votos de Trigueros y los siete de Nerva.

Del lado socialista, el municipio que más votos ha aportado a Juan Antonio García ha sido Isla Cristina (23), seguido en este orden por Gibraleón (14), San Juan del Puerto (11), Aracena (10) y Bonares (8), todos ellos con Gobierno del PSOE

No obstante, lo realmente determinante para la materialización de este vuelco político ha estado, sin duda, en los resultados de las elecciones municipales del pasado mes de mayo, que llevaron a un considerable número de localidades a cambiar de color político, ya que el PP ha pasado a gobernar en 31 de los 80 municipios onubenses, bien en solitario, bien en coalición con otros partidos. De ellos, 68 forman parte de la MAS.

Imagen del pleno de la MAS celebrado al mediodía del jueves en Aljaraque.

Diego del Toro, que releva en el cargo a la que ha sido alcaldesa de Niebla hasta dichos comicios locales, Laura Pichardo, se ha marcado como prioridades en su gestión, nada más tomar posesión del cargo, bajar la tarifa de Giahsa y mejorar las infraestructuras que gestiona dicha empresa pública.

Este empresario de 43 años, natural de Villalba del Alcor, ha agradecido los apoyos recibidos, al tiempo que ha ofrecido trabajar "con mucha ilusión, transparencia y unidad, porque las puertas de la Mancomunidad están abiertas para todos". Entre los retos que se marca, el nuevo presidente ha manifestado su disposición a realizar "un gran estudio para poderle bajar a nuestros vecinos el recibo del agua" y "seguir trabajando en la mejora de las instalaciones e infraestructuras de la empresa púbica".

Diego del Toro, en su toma de posesión como presidente de la MAS este jueves.

Del Toro ha mostrado también su preocupación por los efectos que la sequía está provocando en muchas poblaciones, especialmente en la Sierra, por lo que ha indicado que deben "hacer un gran esfuerzo, tanto desde la Mancomunidad como desde la Diputación y la Junta de Andalucía", para buscar soluciones conjuntas a este problema.

El gobierno de la MAS conlleva la gestión de la empresa pública Giahsa, que de forma mayoritaria en la provincia gestiona el servicio de abastecimiento de agua y el de recogida de residuos urbanos.