PA y UPyD tratan de abrirse un hueco político

Tras las votaciones de mayo de 2003, la fuerte irrupción del Partido Andalucista en la provincia de Huelva logró poner en serias dificultades a los dos grandes partidos que se vienen alternando, PSOE-PP. Su poder en el Condado cobró fuerza lograr las alcaldías de Niebla, Rociana y Villarrasa (hoy sólo mantiene la primera con Francisco Viejo) e incluso supo plantar alternativa al almonteño Francisco Bella, al que amenazó seriamente con arrebatarle la mayoría absoluta. Sólo un lustro más tarde el partido se quedó meramente en un espejismo de lo que fue. Sólo en Niebla y Rociana se puede decir que estén en condiciones de gobernar, ya que en Bonares tan sólo cuentan con 1 de los 13 concejales en liza e incluso las quinielas más optimistas sólo le dan opciones de luchar por romper la hegemonía socialista, que ostenta este partido desde que Juan Carlos Coronel abandonara las filas de independientes y se presentase por el PSOE.

UPyD, partido que a nivel nacional lidera la ex socialista Rosa Díaz, aspira a tomar el testigo de tercera fuerza política, siempre con permiso de IU que recuperó en los anteriores comicios ese puesto. La formación de nuevo cuño nace con la fortaleza que imprime el no verse acosado por manzanas podridas e incluso han existido tibios intentos de presentar candidatura en pueblos de peso como Almonte, donde la decisión de Rafael Díaz de retirarse se desveló como un importante contratiempo. Aun así UPyD podría dar sorpresas de última hora y presentar algunas listas electorales.