Medio Ambiente inicia en las marismas del Odiel el programa de anillamiento de aves limícolas

La Consejería de Medio Ambiente inicia este martes en el Paraje Natural Marismas del Odiel un programa de voluntariado ambiental destinado al anillamiento nocturno de aves limícolas, que se caracterizan por ser de pequeño o mediano tamaño y estar adaptadas a la vida en marismas y lagunas. Según ha informado la Junta en una nota, el objetivo es conocer la importancia de este espacio protegido como área de alimentación y descanso en la ruta migratoria de aves del Atlántico occidental. La campaña se incluye en el proyecto Aves del Litoral, iniciado en 1999 con el fin de proteger las aves marinas de la costa onubense.

Esta iniciativa, que se destinó en un principio al control y vigilancia de las colonias de charrancito y chorlitejo, se amplió en 2000 con el anillamiento nocturno de aves limícolas en el paraje natural Marismas del Odiel. Gracias a estas campañas de anillamiento se han capturado más 25.000 aves, correspondientes a unas 43 especies diferentes. Asimismo, los controles -aves previamente anilladas- capturados han sido 483 ejemplares, procedentes de 23 países (Rusia asiática, Finlandia, Islandia, Noruega, Estonia o Sudáfrica.

A través de estas recapturas se ha podido comprobar que existen ejemplares que siempre siguen la misma ruta, tras sus repetidas capturas año tras año. También se ha constatado que especies como el correlimos zarapatín, el correlimos común y el correlimos menudo toman en la migración prenupcial hacia el norte de Europa la ruta de la zona del Bósforo y en la postnupcial la de El Estrecho de Gibraltar. Además, mediante esta iniciativa se ha comprobado también el paso regular del charrán ártico, que se viene capturando cada campaña, así como otras especies tan singulares como el fumarel aliblanco, el faralopo picofino, el petrel de Bulwer y el charrán bengalés.

Programas de voluntariado ambiental

El Programa de Voluntariado Ambiental de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, iniciado en 1995, está dirigido a entidades asociaciones y organizaciones, constituidas legalmente y sin ánimo de lucro, cuya actuación se circunscriba a todo el territorio andaluz y cuyos objetivos se encuentren en la conservación del medio ambiente y los recursos naturales, la educación ambiental o la promoción social y cultural del medio rural.