La presidenta de la Diputación de Huelva, la socialista María Eugenia Limón, ha mostrado su satisfacción por que la Fiscalía haya pedido el sobreseimiento para su antecesor, Ignacio Caraballo, y exsecretario general del PSOE de Huelva en el caso Aljaraque. Limón señaló también que desde la institución provincial han respetado “en todo momento” el proceso de la causa, informa Europa Press.

La presidenta de la institución supramunicipal ha remarcado que “se alegran tanto por él como por su familia, que han sufrido mucho en todo este proceso”, por el que se encontraban “desolados”.

Además, Limón ha mostrado su respeto por las decisiones de la Justicia, al tiempo que señaló que estaban a la espera del pronunciamiento de la Fiscalía sobre la situación en la que quedaba finalmente el expresidente de la Diputación en el caso del presunto soborno a dos ediles de Sí se puede en el Ayuntamiento de Aljaraque para supuestamente frustrar la moción de censura impulsada en diciembre de 2016 por el PP en la citada localidad, donde gobernaba en aquel entonces el PSOE.

Finalmente, la presidenta de la Diputación apuntó que Caraballo está a la espera de la resolución definitiva de la Fiscalía, ya que “se enteró del sobreseimiento por los medios de comunicación”.

Este martes se conoció que la Fiscalía había formulado su escrito y pedía el archivo para Caraballo, de manera que mantiene la acusación contra tres de los investigados, –los dos ediles y un responsable de CCOO–.

El caso Aljaraque comenzó a investigarse a raíz de una denuncia interpuesta por un vecino de la localidad, colaborador de la agrupación Sí se puede, en la que exponía que la moción de censura contra la alcaldesa del PSOE a finales de 2016 fue retirada supuestamente “tras ofrecer un intermediario del PSOE y miembro de CCOO un empleo en la empresa Aguas de Huelva a la mujer de uno de los dos ediles electos” de esa formación.

La acusación se sustentaba en unas supuestas grabaciones en las que, tal y como constaba en la instrucción, a comienzos de 2017, cuando el grupo municipal de Sí se puede Aljaraque decidió no seguir adelante con la moción de censura acordada con el PP contra la entonces alcaldesa del PSOE Yolanda Rubio, el denunciante del caso Aljaraque, Manuel Alonso Albarracín (asesor de Sí se Puede), decidió grabarse a través de su teléfono móvil en diferentes llamadas que realizó al concejal de Sí se Puede, Francisco Martín, y al sindicalista de CCOO, José Luis Rodríguez, que actuó supuestamente como mediador en la decisión de retirar la moción de censura con el PP.

En esas grabaciones Albarracín centró sus conversaciones, según la instrucción, con Francisco Martín y José Luis Rodríguez en una supuesta contraprestación para que la mujer del concejal de Sí se Puede entrara a trabajar en la empresa Aguas de Huelva, acuerdo que tendría el visto bueno del presidente de la Diputación de Huelva, Ignacio Caraballo.