La Junta inicia en Alájar el plan de demolición de viviendas ilegales

La Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía ha comenzado a poner coto a las miles de construcciones ilegales que jalonan la provincia de Huelva y que se ubican especialmente en espacios protegidos como el Parque Natural de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche y el entorno de Doñana.

Las máquinas excavadoras de la Junta llevan una semana demoliendo un complejo rural ubicado junto a la Peña de Arias Montano, uno de los lugares más emblemáticos de la serranía. Se trata de un conjunto de casas situadas en el Camino del Molino de Alájar que fueron levantadas sin los pertinentes permisos y certificaciones a finales de 2008. La edificación original, una casa de aperos con techo de uralita, un pequeño porche y un gallinero se convirtió en un hermoso chalé con vistas que ocupaba parte de un camino de uso común y hasta un pequeño arroyo, según la información facilitada por los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) que visitaron la zona.

La Junta de Andalucía no ha ahorrado en medios para restablecer la legalidad urbanística en este caso. Hasta el lugar se desplazaron coches patrulla de la Policía Autonómica, Benemérita y Seprona. El grupo autonómico, al que ya se le conoce como Los Intocables, se situó en el camino de acceso para abrir el paso a la máquina excavadora encargada de la demolición. La Consejería también reclamó el auxilio de la Guardia Civil para prevenir incidentes, ya que Medio Ambiente ha enviado cientos de sanciones a los vecinos y compradores de fincas por haber construido ilegalmente en la mayoría de los pueblos de la comarca.

La operación de demolición comenzó poco después de abandonar el lugar los inquilinos que habían pernoctado allí durante el fin de semana del 13 de febrero. Tras las escenas de derrumbe de la edificación, varios camiones de una empresa del Aljarafe se llevaron los escombros.

El conjunto rural fue advertido hace dos años por el Ayuntamiento de Alájar, ya que carecía de permisos municipales y las licencias que está obligada a conceder la oficina del Parque Natural. Posteriormente se personaron los agentes del Seprona de la Guardia Civil y cursaron la correspondiente denuncia que llega ahora a su fin con la demolición de la construcción irregular.

En paralelo al procedimiento administrativo sancionador se abrió el pertinente caso penal. Este paraliza el primero en este tipo de actuaciones, pero no lo anula, así que tras la actuación de las máquinas se reactivará la exigencia de restablecimiento de la legalidad urbanística y reparación de los daños ambientales ocasionados al lugar que goza de especial protección ambiental.

El Ayuntamiento de Alájar está derivando hacia la Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio las numerosas consultas de particulares de la comarca que están solicitando información por los pormenores de la actuación y su vinculación con otras construcciones realizadas en el Parque Natural durante los últimos años y que han sido objeto de expediente sancionador.