Las 11 personas de El Cerro del Andévalo que fueron fusiladas en la Guerra Civil y han permanecido 71 años en una fosa común en Calañas recibirán sepultura mañana en el cementerio de El Cerro. La secuencia para hoy es la siguiente: en el cementerio de Calañas, en el lugar que ocupaba la fosa común, se va a descubrir un monolito por parte del Ayuntamiento de Calañas. Una hora después, en el cementerio de El Cerro de Andévalo, tendrá lugar el homenaje a las once víctimas y el enterramiento en dos nichos de sus restos mortales.

La Asociación de la Memoria Histórica estima que existen 118 fosas comunes en la provincia donde puede haber enterradas 9.700 personas víctimas de la represión franquista durante la Guerra Civil. El biznieto de uno de los fusilados e investigador del suceso, Francisco Javier González Tornero, está convencido que se cierra un capítulo largamente esperado por los familiares. "Las familias desean por fin después de tantos años cerrar este capítulo, es de justicia". En los últimos cinco años se ha desplegado un trabajo intenso por parte del joven investigador y las familias para recabar el mayor número de informaciones que dieran con la identificación de estas personas.

González Tornero indicó que "el homenaje será un gran tributo para estos once cerreños fusilados y no duda que las familias tendrán un gran desahogo al tener un lugar donde poder velar esos retos, cada uno a su manera".

El 13 de noviembre de 1937 once vecinos de El Cerro fueron fusilados en el Cementerio de Calañas víctimas de la represión tras la sublevación y golpe de Estado del General Franco en España. Enterrados en una fosa común, los restos permanecieron en la fosa hasta noviembre de 2008.