La Diputación de Huelva concienciará sobre terremotos y tsunamis a la ciudadanía

Lejos de querer levantar una alarma social, la portavoz de Ciudadanos, María Ponce, defendió ayer en la Diputación Provincial una moción en el marco de terremotos y tsunamis que pudieran ocurrir en el territorio onubense. Se aprobaron dos de los tres puntos que figuraban en su debate dejando a un lado el PSOE que la Diputación se hiciera cargo de adaptar los protocolos de seguridad y los planes de emergencia ante posibles sucesos puesto que entendieron que tal cosa es competencia de la Junta, algo que criticó el Partido Popular con un “como siempre la Diputación sacudiéndose responsabilidades”.

“Que un tsunami va a llegar es una certeza, lo que no sabemos es cuándo”, expuso el portavoz de Adelante, David Fernández, de manera previa a dictar su apoyo a la moción. Por unanimidad se aprobó que la Diputación Provincial promueva e inste a los ayuntamientos jornadas de concienciación e información sobre las causas y consecuencia de estos fenómenos naturales, así como se comprometió a hacer una campaña periódica de información dirigida a la ciudadanía y con extensión a los turistas por medio de los hosteleros con el objetivo de que si ocurre algún suceso se “pueda actuar de la forma más segura”.

De manera consensuada salió adelante una moción de Adelante en la que Diputación cooperará con los ayuntamientos que estimen oportuno la inclusión de “agentes de educación para la salud” en los centros docentes. “La ausencia de personal que asista en los hábitos de salud e higiene a niños de 3 años en primer año de segundo ciclo de Educación Infantil, vulnera el derecho de las familias a una educación integral”, expuso, entre otras cuestiones, David Fernández. En este marco también se aprobó instar a la Junta a que se abran líneas de financiación en este aspecto.

Las tres mociones del Partido Socialista se desarrollaron en el debate del “y tú más” andaluz, tal y como criticó el portavoz de Adelante, y con la entrada de Ciudadanos en el argumentario de la derecha, ambos socios en la Junta. Después de las críticas de gestión de unos y otros, se aprobaron las propuestas del PSOE. En una –con los votos en contra de PP y Cs– pedirán al presidente de la Junta, Juanma Moreno, la creación de una mesa de trabajo con la participación de los grupos políticos y sindicatos para crear un plan que “permita revertir el grave deterioro de la calidad de la sanidad pública en este último año”.

Por otro lado, tras el debate del bipartidismo en el ámbito de la educación, con la abstención de PP y Cs se aprobó una defensa de “la enseñanza pública en general, y en concreto los centros públicos rurales, como un servicio público a la ciudadanía de los municipios de Andalucía, y no justificarlos en términos de rentabilidad económica para el cierre de líneas y unidades en las escuelas rurales de la comunidad autónoma”. Por último, la Diputación instará a la Junta que financie de manera integral el servicio provincial de drogodependencias “como competencia autonómica exclusiva”. El PP consiguió sacar adelante sus mociones entre las que figura instar para que se inicien los trámites para declarar como Bien de Interés Cultural (BIC) la doma vaquera. Asimismo se dio luz verde a que la Diputación “siga colaborando con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y con la Federación Andaluza de Municipios y Provincias en el desarrollo de una estrategia común de lucha contra la despoblación”.