Desmantelan una red de narcos que alijaba droga por aire y mar

Meses de investigación a tres bandas -con la participación de investigadores de la Guardia Civil, Aduanas y del Cuerpo Nacional de Policía- han conseguido desmantelar una de las más activas organizaciones internacionales presuntamente dedicada al tráfico de hachís entre el Norte de África y la península, que tenía a Huelva como puerta de entrada hacia el mercado español y europeo.

La operación bautizada con el nombre de Herradura se ha llevado a cabo en varias fases hasta que las fuerzas policiales la han dado por cerrada con nuevas detenciones en las últimas horas. El operativo se salda con once personas arrestadas por narcotráfico, mientras que otras dos han resultado imputadas, y se han realizado 15 registros domiciliarios en los que se han incautado de 2.400 kilogramos de hachís, dos embarcaciones, once vehículos y una avioneta.

La banda era dirigida desde la provincia onubense, donde se ha detenido al presunto cabecilla y a su principal hombre de confianza. Según la información facilitada en un comunicado por la Guardia Civil, en la cúpula de la organización delictiva se encuentran J.M.C.V. y I.A.H., al que sitúa como "lugarteniente", organizadores de una doble red que controlaba tanto el transporte del hachís por aire como otro subgrupo dedicado a transportar el hachís por vía marítima con potentes embarcaciones.

De hecho, la sospecha de los investigadores de que el grupo estaría buscando en la Sierra de Huelva fincas para utilizarlas como pistas de aterrizaje se confirma después de localizar una pista de aterrizaje y dos avionetas ocultadas en una edificación. En territorio onubense, los registros se han llevado a cabo en Ayamonte, Islantilla, Lepe y en una finca en el Cerro del Andévalo.

La operación arrancó cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento a través de las autoridades de Marruecos de un accidente aéreo ocurrido en su territorio. La avioneta siniestrada procedía del aeródromo de La Juliana en Bollullos de la Mitación (Sevilla) y, aunque la aeronave no iba cargada, existían serías sospechas de que podía estar implicada en tráfico de hachís.

En este punto, concluyen las investigaciones de las fuerzas policiales, ya que el Instituto Armado conoce que tanto Aduanas como la Policía Nacional tienen investigaciones abiertas entorno a la misma trama delictiva, por lo que inicia un operativo conjunto "manteniéndose, a su vez, una intensa colaboración con cuerpos policiales marroquíes y portugueses".

Aunque el cabecilla de la red se encontraba en prisión, llega a los investigadores la posibilidad de que estuviera organizando el desembarco de un alijo de hachís en la desembocadura del río Guadiana, tanto en territorio portugués, como en España, por lo que se organiza un dispositivo en el que se intervienen 78 fardos de hachís y son detenidos los tres ocupantes de la embarcación.

Además de los registros en Huelva, se producen otros en Bormujos, Bollullos de la Mitación y Castilleja de la Cuesta (en la provincia de Sevilla). En una de las viviendas, los agentes se incautan de casi 10 kilogramos de hachís.

En la operación han intervenido unidades tan diversas como el Servicio de Vigilancia Aduanera de Huelva y Sevilla, la Udyco Central y de Valencia del Cuerpo Nacional de Policía así como el EDOA de la Comandancia de la Guardia Civil de Sevilla y Huelva y el Servicio Marítimo de Huelva.