Con el negro como protagonista en la cartelería exhibida para expresar el color del que ven teñido su futuro más inmediato, medio centenar de comerciantes y pequeños empresarios de Palos de la Frontera, Moguer y Mazagón se concentraron ayer en la casa de la cultura de este último núcleo poblacional para reclamar a las administraciones ayudas económicas directas que palíen la falta de ingresos en sus empresas derivada de la actual crisis sanitaria de la Covid-19 y las restricciones a la movilidad y a la libertad horaria de sus negocios que conlleva.
La concentración, que en principio estaba previsto celebrarse en el parque de Mazagón, tuvo que ser finalmente trasladada como consecuencia de la lluvia al salón de actos de la casa de la cultura de dicho núcleo costero, donde procedieron a la lectura de un manifiesto los presidentes de las tres organizaciones empresariales convocantes: Lola Bermúdez de Asplama (Mazagón), Milagros Reyes de Aespa (Palos de la Frontera) y Cayetano Toribio de Apyme Moguer.
Como señaló en declaraciones a Huelva Información la presidenta de Asplama, el de ayer fue un día "histórico" al tratarse de "la primera vez" que unen sus voces dichas organizaciones empresariales porque la situación es "crítica" para el colectivo, pero "especialmente para los sectores del turismo, la hostelería y el pequeño comercio", a los que "o nos ayudan o nos caemos", en referencia a las "muchas familias que lo están pasando muy mal", las cuales dependen de las más de 200 empresas que integran dichas asociaciones, que "generan entre 600 y 1.000 puestos de trabajo directos".
En este punto se refirió a las "ayudas directas" que necesita el sector, sin las cuales "vamos a caer" ya que "nuestras empresas necesitan para sobrevivir que puedan venir clientes de fuera de los tres municipios al estar en una zona eminentemente turística, así como menos restricciones horarias en la apertura de nuestros establecimientos".
"Salimos a la calle para alzar la voz. Somos muy pequeños, pero la unión de muchos nos hará fuertes", expresaron en el manifiesto, donde también exigieron a los Gobiernos central y autonómico "que bajen a los municipios, a las pequeñas localidades que vivimos del comercio, del turismo y de la hostelería, para ver en qué situación nos encontramos" por la "caótica situación económica" derivada de la pandemia.
Entre las medidas concretas que reivindicaron destaca el "mantenimiento de los ERTES hasta que la normalidad real y efectiva vuelva a nuestras vidas", así como la "paralización o reducción" de impuestos como el de Bienes Inmuebles (IBI), el de Actividades Económicas (IAE), la reducción del IVA del consumo al 5%, y la bajada tanto de las cuotas a la Seguridad Social como de los Módulos.
Igualmente exigieron la "libre circulación de vehículos relacionados con la actividad, al menos entre los tres municipios al existir limitaciones provinciales"; así como la eliminación o reducción de algunas tasas municipales para la hostelería y el comercio como la de ocupación de terrazas durante el año 2021, o las de recogida de basura, suministro de agua potable, o alcantarillado, entre otras.
Finalmente, como autónomos, solicitaron la eliminación de la cuota durante el periodo de suspensión de actividad, así como una reducción de la misma en la fase de reincorporación. En relación a los trabajadores por cuenta ajena pidieron la suspensión del pago de cotizaciones por parte de la empresa.
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