Las bodegas amparadas por la Denominación de Origen Condado de Huelva dieron comienzo a la vendimia de la zalema –variedad autóctona de la zona con la que se elaboran los vinos blancos generosos–, que supone un 90 % de su producción, y de la que se prevé este año se recoja algo menos que en 2018.

La recolección, según informó el director técnico del Consejo Regulador de la DOP, Carlos Ibáñez, se ha iniciado esta semana en la localidad de Bollullos Par del Condado, y, en los próximos días se irán sumando de forma progresiva, el resto de municipios, que estarán vendimiando esta variedad durante algo más de un mes.

Ibáñez destaca el buen estado sanitario de la uva, “está muy sana y presenta muy buena calidad”, dijo, precisando que este año la vendimia se ha adelantado una semana respecto a lo normal ya que “el fruto ha madurado antes debido a las condiciones agroclimatológicas que se dieron en los últimos meses de la primavera, con ausencia de precipitaciones”.

Asimismo, indica que el rendimiento por hectárea de vid se estima menor que el año pasado, siendo las previsiones que se reduzca la producción con respecto al año anterior, cuando se situó en alrededor de los 29,5 millones de kilos. Si bien, Ibáñez apunta que “aún es pronto para saber en qué porcentaje se va a reducir”, algo que se concretará a mitad de la vendimia.

Las variedades tintas y otras blancas tempranas suponen apenas el 5 por ciento de lo que se recolecta en el Condado de Huelva, y se está a la espera de conocer las cifras de producción.