Ante miles de personas, tanto en la mañana como en la tarde, sobre todo jóvenes que querían llevar a Nuestro Padre Jesús sobre sus hombros. Había muchísimas ganas de contemplar en las calles a las imágenes que existen en la ciudad en sus distintos misterios y a sus Dolorosas. Y el primero en cruzar el umbral del templo ha sido, Nuestro Padre Jesús Nazareno.

Salía en procesión desde su templo del Socorro a las 9:00, hasta la Parroquia del Salvador, volviendo a su origen a unos trescientos metros, en la tarde del domingo 17 de marzo, llamado en Ayamonte como Domingo de Señas.

La calle Galdames se encontraba totalmente repleta de fieles ayamontinos y foráneos que no querían perderse ese tramo de calle, entre los templos del Socorro y el Salvador. Los cargadores, que no costaleros, ya que van por fuera y cargan con el hombro, se encontraban pletóricos por llevar al Hijo de Dios sobre sus hombros. Sonaban saetas que daban a entender el cariño que en esta latitud se le tiene a Cristo en su Pasión.

Domingo de Señas en Ayamonte 2024.

Paso a paso y muy lentamente, el paso perfectamente exornado, iba recorriendo esos trescientos metros, llegando a la Parroquia del Salvador sobre 10:00. Cabe destacar, la cantidad de jóvenes que por primera vez acudían a la llamada de Cristo, y que querían aportar su granito de arena en algunas “pagaitas”, que les pudieran dar los cargadores.

Ya por la tarde, y después de la Eucaristía de las 19:00, salía nuevamente la imagen, antes miles de feligreses, muchos más que por la mañana, que acompañaron hasta su lugar de origen al Padre Jesús de la Villa, barrio donde está ubicada la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno y Nuestra Santísima del Socorro, haciendo su estación de penitencia en la madrugada del Viernes Santo.

Pregón de la Semana Santa de Ayamonte

Con el Teatro Cardenio completamente abarrotado de ayamontinos, se celebraba el tradicional Pregón de la Semana Santa de Ayamonte, cuya autora fue, Cuchi Bueno Rodriguez, persona muy vinculada la Semana Mayor de Ayamonte y natural de ésta ciudad, que ha sido miembro de Juntas de Gobiernos, y de siempre muy unida a la Hermandad de la Mulita y al Lunes Santo. Estuvo la pregonera en todo momento acompañada por un pianista y un violinista que arrancaron el aplauso general, como así mismo del cantaor de la saeta, el ayamontino Sergio Gago el Cupi.

Presidian el acto el Párroco, padre Manuel, el alcalde Alberto Fernández y el presidente de la Agrupación de Cofradías Javier Boza. Benito Mena Costa, intimo amigo de la pregonera, fue la persona encargada de la presentación del acto. Con palabras llena de vivencias y amor, tanto para la pregonera como para la Semana Santa, presentó el pregón a los asistentes.

Cuchi Bueno Rodríguez pregonera de la Semana Santa de Ayamonte 2024.

El Pregón tuvo una estructura distintas a la que hasta ahora hemos visto. En éste 2024, Cuchi sorprendía con un pregón que comenzaba con unas reseñas de nuestra Patrona la Virgen de las Angustias, como madre de todos los ayamontinos. Continuaba nombrando todas las hermandades, desde el tiempo de sus fundaciones, comenzando ésta con la Hermandad del Santo Entierro del año 1550, donado por doña Teresa de Zúñiga, que posteriormente se sumó a Nuestra Señora de la Soledad y Cristo de la Vera Cruz.

Y a continuación la Hermandad del Viernes Santo de las Angustias, Hermandad del Caído, Hermandad del Martes Santo, con su vinculación a los habitantes de Punta del Moral. Muchísimos aplausos a la pregonera por sus exposiciones y palabras dedicadas a sus titulares, siguiendo con las Hermandades de la Mulita, Hermandad de Padre Jesús y Virgen del Socorro, Hermandad del Miércoles Santo, Hermandad del Cristo de la Buena Muerte, Hermandad de Jesús Resucitado y por último la Hermandad del Cristo de la Humildad y María Santísima de la Estrella.

En el pregón era palpable la sutileza, el amor y las vivencias, pero sobre todo la entrega de la pregonera a la Semana Santa y a todos sus paisanos ayamontinos. En cada palabra Cuchi Bueno supo reconocer y darle su lugar a cada Hermandad, lo que hizo que el público se pusiese en pie agradeciendo sus palabras.