Los socios de la Asociación Zona Ganadera Virgen de los Remedios están desesperados. La afición que tienen por el caballo es ignorada. La tradición por el arte ecuestre, tan arraigada en Andalucía y, como no en Huelva, que la asociación mantiene, no es recompensada por las administraciones, tampoco por la más cercana: el Ayuntamiento de Aljaraque. La falta de ayuda de la Corporación local se traduce en unas instalaciones: la zona de las caballerizas y alrededores, cuya situación el colectivo califica de insostenible. En primer lugar por la deficiencia de infraestructura y en segundo por la situación caótica y falta de orden. Por ello, piden unas instalaciones digas.

Cada socio tiene acondicionada a su manera su cuadrada para atender a los caballos como se merecen; a alguna no le falta detalle. Sin embargo, carecen de suministro de luz y apenas cuenta con presión de agua para que los animales puedan recibir la atención que necesitan a diario y sobre todo en caso de enfermedad. La falta de suministro eléctrico impide la colocación de calefactores y la imposibilidad de realizar intervenciones quirúrgicas en caso de necesidad.

Además la limpieza en el exterior deja mucho que desear, debido en parte a la falta de colectores, así como a la basura que se concentra en las partes traseras de las cuadras. Por todo la inversión que realiza cada uno de ellos se ver mermada, deslucida o empeñada.

Uno de los socios entrenando a un caballo en una pista

La asociación contabiliza más de cien caballos y yeguas, algunos de los cuales participan en campeonatos a nivel regional y nacional. Su intención es disponer de dos pistas y tres círculos para el adiestramiento de los equinos pero con las circunstancias actuales se le antoja un tanto complicado.

La asociación pide la colaboración de todos para adecentar la zona, utilizar los estercoleros señalado y dotarla de uniformidad. Además denuncia robos y hurtos, de ahí que demanden más seguridad.

La historia de estas cuadras se remonta al 1986, cuando los vecinos del pueblo tenían sus animales dentro de sus casas, momento en el que el equipo de gobierno del municipio decidió proporcionar a los ganaderos un terreno en las afueras del pueblo, porque los animales no podían seguir en el casco urbano, ya que empezaban a ser una molestia para la vecindad.

Tras llegar a un acuerdo con los vecinos afectados, el Ayuntamiento procedió a construir las cuadras de dichos ganaderos y documentó a cada uno de ellos, con nombre y apellidos las nuevas instalaciones. Así, poco a poco se fue creando lo que se conoce como zona ganadera, hasta llegar a las 84 cuadras que actualmente existen.

Sin embargo, en el año 94 el Ayuntamiento urbanizó la zona ganadera y puso a la venta la parcela. Una vez señalada ésta por una promotora, el equipo de gobierno, mantuvo varias reuniones con los vecinos de la zona proponiendo unas nuevas instalaciones en otra parcela de propiedad municipal. Tras no alcanzarse ningún acuerdo por las partes, el Ayuntamiento vendió la mitad del terreno a la promotora.

Las cuadras albergan más de cien equinos, algunos de los cuales participan en campeonatos

Desde entonces, los vecinos de la zona ganadera se sienten desplazados por parte de la administración municipal y sin poder atender a sus animales como se merecen, “sin presión de agua y sin luz para que el veterinario pueda utilizar sus equipos”, según el presidente de la asociación, Diego Santos.

En 2017 se creó la Asociación Zona Ganadera Virgen de los Remedios, que denuncia atravesar por una situación lamentable, al no recibir ayuda de la Corporación municipal.

La asociación reclama unas instalaciones dignas, para que los equinos puedan ser atendidos correctamente por los veterinarios. Pero sin suministro eléctrico es tarea imposible. La limpieza brilla por su ausencia y el deterioro de los alrededores de las cuadras está creando un perjuicio para las personas y los animales.