El exfutbolista del Nerva CF, Antonio Muñiz González, recibió este domingo en un acto multitudinario el reconocimiento unánime a su extraordinaria trayectoria deportiva con la entrega del Título de Socio de Honor concedido por la Peña Madridista ‘La Garza Blanca’ de Nerva.

Al acto, presidido por el presidente de la decana de las peñas futboleras en la localidad minera, Fernando Gómez Varet, asistió el exfutbolista del Real Madrid CF, Pepe Salguero, en representación del club presidido por Florentino Pérez, y el alcalde de Nerva, José Antonio Ayala, así como el presidente de honor de la peña local, Juan Carlos Domínguez Cerrato, además de familiares y amigos, excompañeros de Muñiz, y peñistas.

Muñiz se mostró feliz por el reconocimiento tributado por la peña de la que es socio desde hace unos años y tuvo palabras de recuerdo para sus padres y su familia, en especial para su mujer, presente en el acto, y de agradecimiento para todas las personas que se trasladaron de otros puntos de la geografía andaluza para compartir con él tan emotivo acto. También trajo al presente la memoria de entrenadores y compañeros que compartieron con él todo tipo de vivencias futbolísticas en los equipos por los que pasó a lo largo de sus diez años como futbolista.

El reconocimiento hacia la figura de Antonio Muñiz, no sólo como futbolista, sino como persona, así como el de la peña madridista local por su elección y las actividades que organiza a lo largo de la temporada, fue unánime entre todos los presentes, desde los representantes del Ayuntamiento y del Real Madrid hasta compañeros y entrenadores del extraordinario futbolista.

A lo largo de su corta pero intensa trayectoria futbolística, Muñiz pasó por el Sevilla CF, Riotinto Balompié, Olímpica Valverdeña y Nerva CF, equipo de su localidad natal donde se encumbró como uno de los mejores futbolistas albicelestes en sus más de cien años de historia.

Desde hace unos años es socio de la Peña Madridista La Garza Blanca de Nerva porque simpatiza con los valores del Real Madrid CF: la excelencia futbolística, compromiso, espíritu ganador, filosofía de equipo, respeto, solidaridad, humildad y universalidad. Aunque siempre con el Sevilla FC de sus amores en el corazón.

Un almuerzo de convivencia a las puertas de la sede de la peña puso el broche de oro a un emotivo acto, protagonizado por Antonio Muñiz, en el que socios y visitantes pudieron fotografiarse con los trofeos de la Champions y la Copa del Mundo de Clubes, visionar los vídeos de Lorenzo Adame con las actividades más importantes desarrolladas en la peña a lo largo de la temporada y la fabulosa comida preparada por Luis Castilla y Chimeno.

En el libro ‘Nerva, 100 años tras un balón’

El nervense José Luis Lozano Álvez, en su libro Nerva, 100 años tras un balón, califica al exfutbolista nervense como “un jugador elegante y un artista del pase preciso, de enorme clase, de regates fáciles y a veces imposibles, de ser capaz de llevar el balón pegado al pie, y de saber encontrar la jugada y al compañero adecuado para conseguir un lance con muchas posibilidades de gol”. 

Muñiz llega al Sevilla CF como interior derecha a comienzo de la década de los ‘70 para militar durante cuatro temporadas inolvidables, tres como juvenil y una en el Sevilla Atlético. Con los juveniles juega la Liga de España y se proclama Campeón de Andalucía en mayo de 1974, junto a su amigo Antonio Galindo. También defiende las camisetas de las selecciones sevillana y andaluza en numerosas ocasiones. 

Tras su paso por el club hispalense, ficha por el Riotinto Balompié, donde milita hasta la temporada 78/79 y consigue el ascenso a Tercera División en el último encuentro disputado ante el Isla Cristina, con gol de Muñiz.

A la temporada siguiente ficha por el Nerva CF, dejando para la historia uno de los mejores equipos que se recuerdan, con los albicelestes invictos en casa durante tres temporadas consecutivas. En una de las temporadas compagina su papel de jugador con el de entrenador, junto a Antonio Galindo, con el que también llega a coincidir en el Sevilla CF. Sus hermanos Francisco y Manolo siguieron su estela en el Nerva CF.

Su vida futbolística se para en seco tras sufrir un accidente laboral el 4 de febrero de 1982. Tras un largo proceso de recuperación, intenta volver al fútbol, pero termina dejándolo poco después, con 26 años de edad. Poco después, se hace cargo del equipo Juvenil del Nerva CF, llegando a formar uno de los mejores equipos de la categoría que se recuerdan. Su última etapa futbolística la pasa con los veteranos del Sevilla y del Nerva CF.

Todos los que le conocen, destacan de Muñiz su honestidad y compromiso de equipo, buena persona y un excelente jugador, que de haber tenido más suerte se hubiera codeado con los mejores en la categoría Nacional.