En el caso de Isla Cristina, como se anunció en la mañana del viernes, cogió la vara de alcaldesa la independiente Antonia Grao (PIF), apoyada por el PP de Francisco González, los cuales formalizarán un gobierno en minoría con nueve ediles de los 11 necesarios para la mayoría absoluta.

Pese a la solemnidad de la puesta en escena de la sesión plenaria, celebrada en el Teatro Municipal Horacio Noguera con un patio de butacas prácticamente lleno, los reproches no tardaron en llegar, sobre todo por parte de las dos formaciones que gobernarán en la localidad, cuyos portavoces criticaron duramente la gestión del anterior bipartito formado por PSOE y Partido Andalucista.

En este sentido el edil popular se empleó a fondo al afirmar haber decidido "apoyar a la lista más votada por coherencia política y por responsabilidad" y "contra los responsables de la ruina económica de nuestro Ayuntamiento, de los cuales recibimos la herencia de una deuda de más de 40 millones de euros, y los sueldos recortados".

Francisco González también subrayó que "a pesar de ello, hemos apostado por la decisión más difícil, pero también la más coherente". En referencia al gobierno en minoría del que será primer teniente de alcalde esta legislatura, concluyó afirmando que "un gobierno en minoría puede suponer un camino pedregoso y hostil, pero también algo positivo para Isla Cristina".

En parecidos términos se pronunció la ya nueva alcaldesa de la ciudad costera, Antonia Grao, quien señaló que el nuevo gobierno "refleja el cambio que pidieron los isleños en las urnas contra la penosa gestión de PSOE y PA en contra de los intereses de Isla Cristina.

Reconociendo indirectamente la debilidad del gobierno que va a presidir, la líder independiente se fajó en sus mensajes hacia la agrupación de electores de la exconcejala socialista Montserrat Márquez (Ciudadanos por Isla Cristina), que con tres ediles se ha convertido en la llave de la gobernabilidad. "Hacemos un llamamiento al resto de grupos -señaló en este sentido- para sumarse al cambio, y especialmente a CxIC para que se una a nuestro esfuerzo para cambiar Isla Cristina".

El resto de portavoces también tuvieron dardos (muy envenenados en el caso del andalucista Francisco Zamudio) para el nuevo equipo de Gobierno. Así, además de anunciar "el comienzo de la renovación del PA de Isla Cristina", el líder local de dicha formación afirmó que "no todo vale para conseguir lo que uno quiere" a lo que añadió que "la nueva alcaldesa tendrá que explicar si su gobierno tiene la suficiente estabilidad para sacar a Isla Cristina adelante, y por qué ha optado por un gobierno en minoría, aunque puede que tenga una mayoría solapada en alguna otra formación".

Finalmente puso en valor el bipartito del que ha formado parte los últimos cuatro años junto con la socialista María Luisa Faneca, ya que "pese a que somos dos personas muy diferentes hemos aguantado los cuatro años más difíciles de la democracia dando servicios al ciudadano y logrando pagar las nóminas al personal".

Por su parte Pedro Pascual, el nuevo portavoz socialista, quiso dejar clara su "predisposición" al diálogo "al margen de cualquier mercadeo de puestos y sillones" y señaló que "seguiremos trabajando por un equipo que garantice la gobernabilidad".